WASHINGTON. El Departamento de Justicia de Estados Unidos abrió una investigación para determinar si el tiroteo con un saldo de nueve muertos en una iglesia metodista de Charleston (Carolina del Sur) frecuentada por la comunidad negra del lugar fue un “crimen de odio”, adelantó hoy un portavoz.
El portavoz, citado bajo anonimato por los medios, detalló que esa investigación irá en paralelo a la que están realizando las autoridades de Carolina del Sur y se coordinará con el FBI.
El presunto autor del tiroteo, en el que murieron seis mujeres y tres hombres, continúa fugado y, según la Policía local, se trata de un joven blanco y delgado de unos 21 años, con vaqueros, suéter gris y botas.
La Policía ha difundido varias imágenes del sospechoso y del vehículo en el que viaja, y ha solicitado la colaboración ciudadana para dar con él lo antes posible, puesto que va armado y es “extremadamente peligroso”.
Entre las nueve víctimas mortales se encuentra el senador demócrata estatal Clementa Pinckney, también pastor de la iglesia en la que ocurrió el tiroteo.
Al menos tres personas sobrevivieron al ataque, que se produjo alrededor de las 21.00 hora local del miércoles (01.00 GMT de hoy) en la Iglesia Africana Metodista Episcopal (AME) Emanuel mientras se realizaba en su interior una ceremonia de lectura de textos sagrados.
El candidato presidencial republicano Jeb Bush, quien tenía un acto de campaña en la mañana de hoy en Charleston, decidió cancelarlo a raíz del tiroteo.
Mientras, la aspirante presidencial demócrata Hillary Clinton estuvo también en Charleston haciendo campaña horas antes del tiroteo. DM