JOS. Dos explosivos de cuya autoría se culpa al grupo extremista islamista Boko Haram estallaron en una mezquita atestada y un elegante restaurante musulmán en la ciudad de Jos, en el centro de Nigeria, y causaron la muerte de 51 personas, informaron autoridades el lunes.
Los estallidos ocurrieron el domingo por la noche unas horas después de que una mujer se hiciera estallar en una concurrida iglesia evangélica en la ciudad de Potiskum, al norte del país, dejando seis muertes, de acuerdo con testigos.
También el domingo, extremistas volvieron a pueblos del noreste nigeriano que tres días antes habían sufrido ataques para quemar 32 iglesias y cerca de 300 casas, lo que causó la muerte de nueve habitantes, dijo Stephen Apagu, director de un grupo de autodefensa en la zona de Askira-Uba, estado de Borno. Indicó que la milicia mató a tres extremistas.
Los ataques del domingo son los más recientes de los que se culpa a Boko Haram en una oleada de atentados que han causado la muerte de más de 300 personas la semana pasada. El más mortífero dejó 140 personas muertas, la mayoría hombres y niños, quienes el miércoles rezaban en mezquitas del pueblo de Kukawa, al noreste del país.
Los ataques pueden deberse a una orden emitida por el grupo Estado Islámico (EI) a sus seguidores para causar mayor caos durante el Ramadán, mes que los musulmanes consideran sagrado. Boko Haram se convirtió en el representante de ese grupo en el occidente de África el año pasado.
En Jos, 51 personas murieron y fueron sepultados el lunes por la mañana, informó el abogado de la comunidad musulmana Ahmed Garba en conferencia de prensa.
Otras 67 sufrieron lesiones, de acuerdo con Abdussalam Mohamed, el coordinador de la Agencia Nacional de Manejo de Emergencias. La policía confirmó que hubo explosiones pero dijo que no puede darse una cifra final de víctimas debido a que se seguían realizaron tareas de búsqueda entre los escombros.
La explosión en la mezquita de Yantaya ocurrió cuando el clérigo Sani Yahaya, de la organización Jama’atu Izalatul Bidia, que predica la coexistencia pacífica entre todas las religiones, se dirigía a una multitud, señalaron sobrevivientes.
Hombres armados abrieron fuego contra la mezquita desde tres direcciones, dijo el abogado Garba.
Danladi Sani, uno de los sobrevivientes, dijo que vio a un hombre vestido de blanco abrir fuego contra Yahaya y luego se hizo estallar. Yahaya no sufrió lesiones, dijo.
Otra bomba estalló en Shagalinku, un restaurant frecuentado por gobernadores estatales y otros integrantes de las élites políticas que buscan especialidades del norte de Nigeria, donde predominan los musulmanes, dijeron testigos.
El presidente nigeriano, Muhamadu Buhari, condenó los ataques contra sitios de culto del domingo y dijo que el gobierno defenderá el derecho de los nigerianos a profesar su fe con libertad.
08:21 horas – Ataques dejan 44 muertos
Un total de 44 personas murieron y 67 resultaron heridas después de que dos bombas estallaran el domingo por la noche en una abarrotada mezquita y un lujoso restaurante musulmán en la ciudad de Jos, en el centro de Nigeria, según un responsable de emergencias.
Los heridos estaban atendidos en hospitales, indicó Abdusalam Mohamed, de la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias.
La explosión en la mezquita de Yantaya se produjo cuando un conocido clérigo que predica en favor de la coexistencia pacífica se dirigía a una multitud durante el mes sagrado del Ramadán, según testigos que pidieron anonimato por temor a represalias.
Otra bomba estalló en Shagalinku, un restaurante frecuentado por políticos de alto nivel.
Jos se encuentra en la zona que linda con el norte de mayoría musulmana y el sur de mayoría cristiana en el país. La ciudad ha sido objeto en el pasado de atentados reivindicados por los extremistas islámicos Boko Haram, que han matado a cientos de personas. DM