Flavio Sosa, ex líder de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) preso en el sexenio de Felipe Calderón por 10 meses en la sección de tratamiento especial del penal del Altiplano, de donde se fugó Joaquín El Chapo Guzmán, negó que haya puntos ciegos en las celdas como explicó el secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong en conferencia de prensa, por lo que el capo no pudo escapar sin ayuda.

En entrevista para diversos medios radiofónicos nacionales detalló que aunque en la celda de El Chapo cada uno tiene sus propias regaderas, la hora de baño es a las 5:45 am, “Si tu la abres durante el día o noche se activa alarma, por eso resulta inverosímil que no lo hubieran notado”.

“Las celdas son muy pequeñas de dos por tres metros, estas enjaulado (…) yo estuve preso porque donde defecas la cámara te tiene perfectamente enfocado, es decir estás defecando y la cámara te está observando”, dijo.

Aseguró que la cámara sí alcanza a ubicar la regadera porque está en la parte superior izquierda de la celda, “lo único que se me ocurre es que el vapor del agua caliente enturbie un poco la visión, pero siempre te observan”.

Explicó que las medidas de control son extremas, con videovigilancia las 24 horas y “cada que entras o sales de tu celda te desnudan, el día que sales a juzgados te desnudan por lo menos cuatro veces”, rememoró.

“Si hablan de un punto ciego, el único lugar que no está a la plena vista de las cámaras es debajo de la cama, pero no podrías meterte ahí debajo”, expresó.

Asimismo condenó que se pongan de pretextos los derechos humanos para justificar la fuga, pues calificó al Altiplano como un lugar sórdido, “ahí no se respetan a los derechos humanos, se maltrata todos los días a presos, se les humilla”.

Sobre la posibilidad de hacer el boquete para el túnel desde adentro, lo consideró completamente imposible pues no les permiten tener ni una pluma en la celda y realizan al menos tres revisiones al mes con perros.