La Reserva Federal  de Estados Unidos (Fed) decidió no aumentar su tasa de referencia, sin embargo el tono del comunicado de la política monetaria dejó abierta la posibilidad que este incremento se dé en septiembre próximo.

 

 

Este miércoles, el organismo que encabeza Janet Yellen, expresó que en “el mercado laboral (estadunidense) continuó la mejoría, con sólida creación de empleo y desempleo a la baja”, elementos que fueron interpretados por los analistas como un aviso de una inminente alza en las tasas de interés.

 

Desde finales de 2008, estas tasas se ubican entre 0% y 0.25%;  luego de dos días de reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), la Fed estará en espera que se cumplan datos como la estimación de 3% del cálculo del Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre del año, así como el aumento en la inflación y el índice de precios estadunidense.

 

De confirmarse esos datos, se sumarían a las señales positivas de gasto de los consumidores y pedidos de bienes duraderos, lo que implicaría un escenario apropiado para el alza de las tasas de interés en Estados Unidos, consideraron los analistas.
Si bien el anuncio de la Fed dio un ligero respiro al peso frente al dólar,  economistas aseguran que la volatilidad de la moneda nacional continuará los próximos dos meses.

 

El economista Jonathan Heath, señaló que el comunicado publicado por la Fed da incertidumbre sobre la medida que tomará en septiembre próximo en materia de política monetaria, por lo que “la volatilidad del peso frente al dólar no va a desaparecer en el corto ni mediano plazo, habrá que estar atentos a las decisiones del Banco de México (Banxico)”.

 

Este jueves, el banco central mexicano anunciará su política monetaria en el país, y aunque analistas aseguran que no modificará las tasas de interés hasta que Estados Unidos lo haga, Heath expresó que habría que estar a la expectativa de “cualquier sorpresa”.

 

“El hecho de que el peso se haya depreciado tanto en las últimas dos semanas está presionando al Banxico y existe la posibilidad de que decida anticiparse un poco a la Fed y suba la tasa para mandar una señal de que no va a permitir que el tipo de cambio se debilite”, comentó.

 

Por su parte,  Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, anticipó que el Banxico esperará a tomar una medida de este tipo, “ya que la inflación está a niveles mínimos históricos y un incremento en tasa desincentiva el consumo y la inversión”.

 

Los especialistas coincidieron que la decisión de la Fed estará apegada al comportamiento del empleo e inflación estadunidenses, por lo que ningún otro factor podría pesar tanto para que se tomen decisiones al respecto, incluso el turismo, que puede verse mermado por el alto precio del dólar, no resulta un aspecto que pudiera modificar la decisión de la institución monetaria.