Las finanzas públicas de Guerrero registraron en 2012 la tasa más alta de dependencia de la Federación debido a su bajo nivel de recaudación. En ese año, 95.5 de cada 100 pesos gastados por el gobierno del estado correspondieron a transferencias del gobierno federal y apenas 4.5 a ingresos propios.
Con ese nivel de dependencia la entidad se ubica muy por arriba del promedio nacional, según el cual 80 de cada 100 pesos que gastan los estados provienen de la Federación y el resto a ingresos propios, esto de acuerdo con un análisis de la Dirección General de Servicios de Documentación, Información y Análisis de la Cámara de Diputados.
La reducida generación de ingresos propios por parte de las entidades, y en particular en Guerrero, no está precisamente relacionada con la cantidad de impuestos vigentes.
En 2012, y según cifras oficiales, con 10 gravámenes vigentes Guerrero se ubicaba entre las entidades con mayor cantidad de impuestos, después de Nayarit que contaba con 12. A pesar de ello, la primera entidad es la más dependiente de las transferencias federales, mientras que la segunda es la cuarta en este rubro.
En cambio, el Distrito Federal, con apenas seis impuestos genera 40 de cada 100 pesos que gasta.
De acuerdo con el análisis legislativo, la relación entre las transferencias federales y una limitada generación de recursos propios ha incidido en el endeudamiento de las entidades.
Si bien el monto de la deuda de Guerrero, por 3.1 mil millones de pesos al cierre de marzo pasado es bajo en comparación con otras entidades, en 2013 la entidad se ubicó como la octava con el mayor incremento. En este año sus pasivos aumentaron 16% en comparación con 2012, mientras que el endeudamiento del total de las entidades creció 11%.