Las quejas contra despachos de cobranza por acoso se han más que triplicado en México, con ciudadanos molestos por llamadas a deshoras en muchas de las cuales se les reclama por deudas que no tienen.

 

El presidente de Condusef, Mario Di Constanzo, dijo el viernes que por irregularidades detectadas tras quejas de la gente se han impuesto multas equivalentes a unos 12 millones de dólares contra esos despachos de cobranza que trabajan para bancos y otras instituciones financieras.

 

El funcionario dijo que en los primeros seis meses del 2015 su oficina recibió 16.201 quejas, frente a las 4.997 en el mismo periodo del 2014.

 

Di Constanzo refirió que cerca de la mitad de las quejas de este año fueron por recibir llamadas para reclamarles deudas que en realidad no tenían.

 

La siguiente mayor causa de reclamos ante el organismo, conocido como Condusef, fue por llamadas telefónicas muy entrada la noche, en las cuales los empleados de los despacho los amenazaban o insultaban, lo cual está prohibido por las regulaciones federales.

 

El sector bancario mexicano tiene altos niveles de deudas atrasadas. Pero los bancos no tienen un buen seguimiento sobre sus clientes y, por ejemplo, no siempre los números registrados corresponden a los usuarios.

 

Bajo las leyes actuales, cualquier que interponga una queja por acoso debe acudir a una audiencia y probar que no tiene ninguna deuda para que cesen las llamadas.