GUATEMALA. El expresidente guatemalteco Otto Pérez Molina ingresó a un cuartel militar en la localidad de Matamoros, en el que pasará la noche bajo custodia antes de que se reanude la sesión en una audiencia judicial en la que enfrenta acusaciones de corrupción.
Fue trasladado desde el tribunal en una camioneta deportiva y escoltado por una decena de vehículos policiales, en un principio rodeados por múltiples cámaras de la prensa.
El juez Miguel Ángel Gálvez ordenó que Otto Pérez Molina sea detenido provisionalmente para garantizar su seguridad y asegurar que se presente a su audiencia el viernes, al determinar que existe riesgo de fuga.
Posteriormente la audiencia continuará a las 8 de la mañana del domingo.
Los jueces están escuchando evidencia de fiscales que buscan presentar cargos penales contra el hombre que fue presidente del país.
Pérez Molina rechaza las acusaciones, a las que considera rumores. Dice que es innecesario que lo manden a la cárcel y reiteró su disposición a enfrentar directamente la pesquisa por corrupción.