GUANAJUATO. El presidente Enrique Peña Nieto inauguró la autopista Salamanca-León, la cual aseguró impulsará la industria automotriz en la zona del Bajío.
Señaló que la obra tiene más proyección y más dimensión de la que se supone e imagina. Forma parte del corredor carretero Querétaro-Ciudad Juárez y México-Nuevo Laredo con ramal a Piedras Negras.
Durante el acto de apertura, el Ejecutivo dijo coincidir en objetivos con el gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, en impulsar el desarrollo de la región.
Peña Nieto agregó que su administración planea construir y entregar 52 autopistas antes de que concluya su mandato, sin incluir los kilómetros de carreteras federales que se están reparando o ampliando.
Acompañado por el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, detalló que es responsabilidad del gobierno generar mejores condiciones y de actuar con responsabilidad para propiciar las condiciones de confianza que el país debe reflejar al resto del mundo.
Las reformas y su instrumentación brindarán la confianza necesaria para que los inversionistas se acerquen al país y que esta “es la principal divisa”.
Durante la actual administración México consolidó como el séptimo productor y cuarto exportador de automóviles en el mundo. La plataforma de exportación de vehículos sigue creciendo, en lo que va del año se han vendido 833 mil autos dentro del país, 34% más de los que se vendieron en 2012, esto es el reflejo del mayor consumo interno frente a la volatilidad económica global.
Esta obra, cuya construcción inició en marzo de 2011 y finalizó en agosto de 2015, tuvo una inversión del sector privado de tres mil 450 millones de pesos, y tiene una longitud de 79 kilómetros, con un tránsito diario de ocho mil 900 vehículos.
Permitirá más seguridad y eficiencia en el movimiento de bienes y personas entre los municipios de Salamanca, Irapuato, Silao, Romita y León. Además, brindará más rapidez de desplazamientos y mejores niveles de servicio y disminuirá los costos de operación vehicular.