Otra empresa mexicana anunció públicamente su intención de participar en la tercera licitación de la Ronda, que incluye la explotación en campos maduros en tierra en 25 áreas contractuales, y que hasta ahora ha tenido la mayor concurrencia, sobre todo de firmas nacionales.

 

Se trata de Emusa Energy Group (EEG), que con poco más de dos años de haber sido constituida, alista su entrada a esta nueva fase, y que se suma a las 96 empresas que hasta el 15 de septiembre habían mostrado su interés, de las cuales 64 ya habían pagado el acceso al cuarto de datos y de estas 60 habían iniciado su proceso de precalificación.

 

El director general de la empresa, Alberto Bessoudo Sustiel, declaró que la compañía tiene en la mira entre cinco y siete campos terrestres para la extracción de hidrocarburos “en los que podríamos presentar una oferta, siempre y cuando haya un balance entre lo que pide el gobierno y lo que nosotros queremos con inversionistas”.

 

Explicó que están enfocados en los campos maduros terrestres de la Ronda Uno, los cuales si bien son chicos, tienen una atractiva rentabilidad, para con el tiempo migrar a oportunidades más grandes una vez que obtengan la solidez y soporte que implica la experiencia y la madurez que dan los proyectos.

 

“En la tercera fase son bastantes campos, son 25, hay algunos de gas y otros de aceite, son campos que en el papel son bastantes chicos, pero que muchos de ellos han tenido factores de recuperación bajos donde hay mucho trabajo por hacer y aplicar, para poder tener rentabilidades atractivas”, expresó.

 

Para el directivo, aunque el factor del precio del petróleo es difícil de predecir, el reto es ajustarse y enfocarse a que los proyectos en los que buscan participar sean rentables bajo los valores actuales.

 

Esto, añadió, porque si bien el mercado se regularizará, difícilmente regresará a los 100 dólares por barril.

 

De hecho, comentó que en zonas terrestres aumenta el costo de producción por tonel, por lo que el análisis de cada uno de los campos es muy importante, debido a que algunos cuentan con cierta producción estable y se tendrían que hacer ciertas modificaciones, aprovechar cierta parte de la perforación y desarrollo que han tenido.

 

Para estos 25 campos en comunidades de Chiapas, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Nuevo León, se prevé una inversión de 620 millones de dólares en los próximos cinco años por la extracción de hidrocarburos.