Para el presidente de la Comisión Especial para la Reforma Política del Distrito Federal, José Alfaro Cázares, los diputados locales deben participar en la construcción de la Constitución Política y no sólo el Congreso de la Unión y representantes del presidente y del Jefe de Gobierno.
En una entrevista con 24 HORAS, el legislador local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) aseguró que buscará incidir en la modificación del proyecto de decreto que aprobó el Senado y que actualmente se encuentra en la Cámara de Diputados, para revisar la integración de la Asamblea Constituyente. “Queremos ser actores activos, no queremos ser irresponsables observadores”, planteó.
Hace casi siete meses, el Senado de la República aprobó la tan anhelada reforma política del DF, con el fin de que se cambie el estatus jurídico de la ciudad y tenga más autonomía como el resto de las entidades. Incluso, podría contar con una constitución propia, la cual estaría a cargo de una Asamblea Constituyente, distinta a la ALDF. Actualmente el documento está en revisión en la Cámara de Diputados.
¿Cuál será el papel para apurar la reforma?
Nos planteamos en la Comisión poder participar con la Cámara de Diputados aportando nuestra opinión, apoyando en la integración de esquemas de consulta con los especialistas, para ir aportándole elementos con relación a las modificaciones constitucionales que deban hacerse.
Hay quienes pensamos que la Constitución de la República debe dejar un margen muy amplio de decisiones a la Asamblea Constituyente, es decir, que no nos dicten en la reforma lo que debe ser la Constitución de la Ciudad de México.
¿Habrá un costo por la reforma política?
Como si la democracia pudiera cotizarse en pesos, como si la estabilidad y el desarrollo económico y social tuvieran un costo en su instrumentación y eso fuera lo más importante.
El ejercicio democrático de gobierno para hacerlo Ciudad de México capital federada no tiene precio, no podemos decir que sale caro o barato, yo creo que debemos hacer todo lo necesario para que se concrete la reforma.
¿Harán un estudio para saber cuánto costará la implementación?
Por su puesto que tiene que hacerse, dentro de lo que es la construcción de ese entramado institucional deben hacerse las previsiones presupuestales para que todo esto funcione. No es crea el órgano y a ver luego cómo lo pagamos.
La ALDF ya tiene fama de ser costosa…
Eso no puede empañar lo que significa el costo normal, natural, lógico, en la integración y operación de órganos representativos y de gobierno. Tendremos concejales, recibirán un sueldo, porque hasta la Constitución lo establece así. Vale más hacer transparentes las cosas y no disfrazar los trabajos honorarios. Deberán tener un lugar donde trabajar y un personal de apoyo.
Pero la reforma política no debemos identificarla en el ámbito de que deriva en el engrosamiento de una estructura burocrática y política innecesaria, ésa es la parte menos trascendente de la reforma política; y me preocupa que se quiera desviar la atención de lo que realmente significa la reforma política por un asunto de pesos y centavos.
¿Hace falta una reforma administrativa previo a la política?
Hay muchas cosas que pueden ir avanzando en tanto se da la reforma constitucional y en tanto se da el proceso del constituyente. Por supuesto, podemos avanzar en reformas para ir alcanzando objetivos de la propia reforma política. No tenemos por qué esperarnos a que se promulgue la Constitución de la Ciudad de México para poder perfeccionar este orden legal.
Eficientar la administración previo a la reforma política…
Nosotros en la Comisión de Reforma Política, que no tenemos materia como administración, turismo, desarrollo económico, etcétera, vamos a formularle a nuestros compañeros de las distintas comisiones las propuestas de reformas legales en la actual legislación que vayan orientadas a los objetivos de una reforma política. Como esta reforma en el ámbito administrativo que perfeccione el ejercicio de gobierno.
¿Cuáles serían esas modificaciones que buscan?
Revisar la integración de la Asamblea Constituyente, replantear la propuesta de constituyentes designados; la segunda tiene que ver con la hacienda y la administración pública de la Ciudad de México. El tercer punto que tiene que analizarse es el nivel de autonomía que tendrán las alcaldías, que se asemejen a un municipio, y que el órgano colegiado se elija junto con un presidente municipal.