WASHINGTON. El presidente Barack Obama, defendió los progresos contra el Estado Islámico, al que los ataques de la coalición internacional están golpeando “más fuerte que nunca”, y dijo a los líderes del grupo yihadista que no se podrán esconder, aunque admitió que hay que avanzar más rápido porque se trata de una “lucha difícil”.

 

Obama visitó el Pentágono y celebró allí una reunión con su Consejo de Seguridad Nacional, a cuyo término habló ante los periodistas para volver a defender su estrategia contra el EI, como hizo hace ocho días en un discurso a la nación televisado.

 

La estrategia de Obama, que gira en torno a la coalición internacional antiyihadista formada por 65 países y a evitar una nueva intervención militar de EU al estilo de las de Irak y Afganistán, enfrenta desde hace tiempo críticas que han crecido tras los ataques terroristas de París y la matanza de la localidad californiana de San Bernardino.

 

“Los líderes del EI no se pueden esconder y nuestro mensaje para ellos es simple: son los siguientes”, subrayó el presidente, para quien hay que ser “implacables” y, a la vez, “inteligentes” contra el grupo, para golpearlo “con precisión”.

 

Según Obama, en noviembre se lanzaron “más bombas” contra objetivos del EI que en ningún otro mes desde que comenzó la campaña militar a mediados de 2014 y, desde el pasado verano, el grupo “no ha tenido ninguna gran operación ofensiva exitosa sobre el terreno en Siria o Irak”. El mandatario precisó, asimismo, que los yihadistas han perdido un 40% de las áreas que controlaban antes en Irak.

 

Obama anunció que su secretario de Defensa, Ashton Carter, viajará hoy mismo a Oriente Medio para tratar de aumentar las contribuciones de esos países a la campaña militar de la coalición internacional contra el EI.

 

Coquetea con visitar Cuba, pero con una condición

 

En otras noticias, el mandatario dijo en una entrevista con el portal Yahoo, que espera poder visitar Cuba en 2016, en su último año de mandato, pero solo hará ese viaje si se dan las condiciones para reunirse con disidentes en la isla.

 

“Si voy de visita (a Cuba), parte del trato es que voy a poder hablar con todo el mundo”, explicó Obama en vísperas del primer aniversario del anuncio histórico del inicio del proceso para normalizar las relaciones bilaterales entre EU y el país caribeño.

 

“He dejado muy claro en mis conversaciones directamente con el presidente (Raúl) Castro que continuaríamos contactando con aquellos que quieren ampliar el alcance de la libertad de expresión dentro de Cuba”, afirmó y agregó pero “si vamos hacia atrás, no hay motivos para que yo esté allí. No estoy interesado en validar el statu quo”.