Época de regalos, de dar y recibir. Y haciendo una reflexión he caído en la cuenta de que uno de los mejores regalos que he tenido en la vida, a parte, evidentemente, del regalo de la vida misma, el de mi familia, mis hijos y mi esposo como maestro de vida; ha sido el poder conocerme a mí misma, el poder aceptar y reconocer en mi partes que antes ni siquiera podía imaginar que existían y formaban parte de mí, emociones, formas de actuar, de reaccionar y defenderme en el mundo que no siempre han sido lindas o funcionales. Y este gran regalo lo he ido recibiendo y tomando a lo largo de varios años de intenso trabajo de conciencia.
Digo que es regalo porque, aunque el proceso en ocasiones ha sido doloroso y fuerte, las gratificaciones que he ido obteniendo no tienen precio. Me han llenado de luz, amor a mí misma, compasión, energía vital y autenticidad. Aclaro que todo esto que recibido no tengo manera de pagarlo.
Te cuento que mi experiencia personal al recorrer este camino interior ha sido apoyada, guiada, contenida y acompañada siempre por personas sensibles, amorosas, compasivas, que han estado para mí y para mí grupo a lo largo de este trayecto, aceptándome con todo lo que soy y con todo lo que he ido descubriendo de mí misma. En un lugar hermoso lleno de paz que ha contribuido en la posibilidad de ir a profundidades interiores inimaginables, un lugar que abraza el proceso grupal y personal con sus montes verdes llenos de energía que ayuda a sostenerte ahí.
Si tú quieres darte este regalo de vida y te interesa el trabajo Psicocorporal, yo te invito a que te atrevas y des un paso más. Te recomiendo ampliamente el instituto donde yo he logrado encontrarme más conmigo misma, siempre cuidada y acompañada adecuadamente. El instituto del que te hablo se llama Corpore. Aquí te dejo los datos y el contacto para informes, los cursos inician en febrero del 2016. Le puedes escribir a Julia Caso al mail julia@corporal.com.mx o llamar al (777) 328 1164.
Te aseguro que, si estás listo para entrar en ti y abrir tu conciencia, no te vas a arrepentir. Date ese regalo a ti mismo y a los tuyos, si sanas tú ellos también entran en el camino de esa energía sanadora. Regálate ese espacio para ti. ¡Muchas Felicidades!