LONDRES. Los solicitantes de asilo que han recibido alojamiento en Cardiff (Gales, Reino Unido) están obligados a lucir una pulsera de colores brillantes que les identifique, lo que ha provocado diversos casos de acoso contra ellos.

 

El diario The Guardian reveló que la empresa Clearsprings Ready Homes, contratada por el ministerio de Interior para gestionar el alojamiento y la manutención de los refugiados en la capital galesa, les exige que lleven en todo momento la pulsera para tener derecho a recibir tres comidas al día.

 

“Nos dijeron que si nos negamos a llevarla informarán al ministerio”, explicó al diario Eric Ngalle, de 36 años, que aseguró que cuando se negó a lucir la identificación en la muñeca dejaron de proporcionarle alimentos.

 

Al caminar por la calle, “en ocasiones algunos conductores ven nuestras pulseras, empiezan a hacer sonar el claxon y gritan por la ventanilla: “Volved a vuestro país. Hay personas que nos dicen cosas terribles”, relató Ngalle.

 

Esta semana ya levantó polémica en el Reino Unido el color rojo con el que se pintaron las puertas de las casas donde viven solicitantes de asilo en Middlesbrough, en el noreste de Inglaterra, una medida ha incitado diversos ataques racistas.

 

Los solicitantes de asilo en Reino Unido no tienen permiso de trabajo ni tienen derecho a reclamar las prestaciones sociales convencionales, sino que reciben alojamiento y alimentos.

Clearsprings Ready Homes señaló a The Guardian que “aquellos clientes alojados en pensión completa reciben una pulsera de color que no lleva ningún logotipo o texto que identifique su uso”.