DAMASCO. Al menos 21 personas murieron y decenas resultaron heridas hoy durante bombardeos supuestamente perpetrados por fuerzas rusas o sirias contra dos hospitales y una escuela en las provincias de Alepo e Idlib, en el norte de Siria.

 

En el ataque más letal, 14 personas fallecieron y unas 30 quedaron heridas por el impacto de varios misiles contra un hospital infantil, un colegio y otras zonas en la ciudad de Azaz, en la provincia de Alepo, controlada por los rebeldes junto a la frontera con Turquía.

 

Al menos cinco misiles cayeron sobre el hospital y en una escuela cercana, donde estaban albergados refugiados que huyen de la ofensiva lanzada por el Ejército sirio, según fuentes médicas y testigos.

 

Otras siete personas perdieron la vida y varias resultaron lesionadas por otro ataque aéreo contra un hospital gestionado por Médicos Sin Fronteras (MSF) cerca de Marat al-Numan, en la norteña provincia de Idlib, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

 

“Un edificio que albergaba un hospital apoyado por MSF fue íntegramente destruido el lunes, seguramente por aviones rusos, en Hadiyé, localidad al sur de Marat al-Numan”, denunció el OSDH.

 

La organización humanitaria MSF condenó y calificó el bombardeo contra el hospital de “deliberado” y confirmó que además hay ocho trabajadores desaparecidos.

 

El coordinador general de MSF en Siria, Massimiliano Rebaudengo, destacó que la destrucción del hospital dejará sin atención médica a unas 40 mil personas.

 

No es la primera vez que un centro médico que recibe apoyo de MSF es atacado en Siria, pues el pasado 5 de febrero, tres personas murieron y otras seis, entre ellas una enfermera, resultaron heridas por un bombardeo contra el hospital de Tafas, en el sur de Siria.

 

El primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, quien se encuentra de visita en Ucrania, acusó este lunes a Rusia de actuar como una “organización terrorista” en Siria y ha prometido una dura respuesta.

 

“Desafortunadamente los ataques contra civiles continúan en Siria y estos ataques los están llevando a cabo tanto los rusos como grupos terroristas”, declaró Davutoglu, quien poco antes de llegar a Kiev aseguró que Turquía no dejará que Azaz caiga en manos de las fuerzas kurdas.

 

Desde 2012, Médicos Sin Fronteras gestiona seis hospitales en el norte de Siria y 153 centros de cuidados médicos en todo el país.