Debiera ser un buen experimento.
Pero ante la evidencia de los resultados, la proyección de gobernantes jóvenes es motivo de análisis y de preocupación en las cúpulas gubernamental y de partidos políticos.
A este sexenio le han explotado varios ejemplos.
Comenzó con Rodrigo Medina en Nuevo León.
Llevado al poder por Natividad González Parás, la ciudadanía vio con satisfacción a un titular del Poder Ejecutivo con acciones atinadas en materia de seguridad pública.
Pero también se escandalizó con la injerencia del papá del mandatario, Humberto Medina Ainslie, y sobre todo con los rumores de enriquecimiento a consecuencia de la manga ancha de su hijo.
Resultado: de ese fenómeno de corrupción se colgó el candidato ciudadano Jaime Rodríguez El Bronco para arrasar, aunque no ha podido ajustar cuentas con su antecesor ni cumplir a los nuevoleoneses.
Otro ejemplo es Javier Duarte de Ochoa, un capricho de su padrino y compadre Fidel Herrera Beltrán.
Hoy Veracruz, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el candidato Héctor Yunes Landa pagan las consecuencias de ese desatino y de un gobernador sin oficio político.
En la misma circunstancia está Jalisco, donde el PRI se vio arrasado a mitad del sexenio de Aristóteles Sandoval por sus propios errores y los de su padre Leonel Sandoval.
A estos ejemplos se suma Roberto Borge, cuyo pleito con Carlos Joaquín puede resultar costosísimo para el PRI.
Aunque, debe acotarse, Manlio Fabio Beltrones descartó al delfín José Luis Chanito Toledo y optó por un hombre más destacado, más maduro y con eficiencia administrativa probada: Mauricio Góngora, alcalde de Solidaridad.
Con estos antecedentes, es refrescante el anuncio de Alejandro Murat Hinojosa: hacer campaña con su propio equipo y ser el único responsable del manejo de Oaxaca.
Plan de emergencia económica a campeche
Un evento deportivo de escaso interés sirvió de escaparate internacional para Campeche.
El gobernador Alejandro Moreno Alito logró llevar la serie de Copa Davis entre México y Guatemala, fácilmente lograda por los anfitriones.
Pero fuera del estadio Juan Camilo Mouriño los visitantes vieron un estado muy tranquilo –“el más seguro del país, aunque nos peleemos el primer lugar con Yucatán”, sostiene Alito–, con vida nocturna, jóvenes festivos en el malecón y un mandatario en recorrido de madrugada solo.
–No tengo escoltas. Ando siempre sólo con mi chofer y yo mismo suelo manejar –explica lo evidente.
Pero también un gobernador preocupado: la crisis petrolera ha privado a Campeche de casi dos mil millones de pesos anuales, ha obligado a despedir a 15 mil trabajadores calificados con altos ingresos y ha dejado a 350 empresas en riesgo en Ciudad del Carmen.
Por ello estructura con el gobierno federal un Plan de Reactivación Económica, a anunciarse en dos semanas conjuntamente con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.
Viene un rediseño del estado: maquiladoras, grandes plantaciones de palmeras –100 mil hectáreas en seis años–, uso pleno de dos puertos a cargo del gobierno estatal y otras acciones.
Si otros gobernantes tuvieran esta visión, no se limitarían a pedir apoyos federales.
IFT y nuevo reto en telecomunicaciones
1.- Hoy hace dos años el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) declaró la preponderancia de Televisa y América Móvil.
Por ley deberá revisar la situación actual y la concesión de Teléfonos de México (Telmex) y tomar decisiones hacia noviembre.
El organismo de Gabriel Contreras deberá irse con cuidado porque por su manga ancha pueden diluirse la reforma de telecomunicaciones e irse las inversiones millonarias de empresas como AT&T, Movistar y otras trasnacionales.
Y 2.- Héctor Astudillo paga la opacidad de sus antecesores.
Entre las muchas anomalías, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) señala el desvío de 69 millones dedicados a seguridad pública y mejoría policial durante la administración de Ángel Aguirre.
Pero, ¿de qué sirven los señalamientos si Astudillo no ve esas partidas para subsanar omisiones?