Para evitar que las iniciativas ciudadanas se queden en la “congeladora” legislativa, la senadora Silvia Guadalupe Garza Galván, del PAN, propuso otorgar el carácter de preferente a las iniciativas que presenten particulares y asociaciones civiles; siempre y cuando cumplan con los requisitos de Ley.

 

Hasta el momento, el Senado de la República ha recibido en Comisiones dos iniciativas ciudadanas, la más reciente, de parte de organizaciones civiles que proponen la creación de una Ley General de Cultura que busca regular y coordinar a todos los órdenes de gobierno para la conservación del patrimonio cultural.

 

Y otra más del Consejo Mexicano de la Familia que busca que se reconozca al matrimonio como una institución de interés público y fundamento de la familia, a través de modificaciones al artículo cuarto constitucional.

 

Las dos iniciativas fueron turnadas a las comisiones correspondientes, donde serán enlistadas en los pendientes que tienen junto con las presentadas por los senadores; sin embargo, las Comisiones deben esperar que termine un proceso previo que sólo recorren las iniciativas ciudadanas.

 

Y es que, contrario a las propuestas de los legisladores y el propio presidente, las iniciativas ciudadanas deben estar avaladas por al menos 100 mil firmas y éstas deben ser dictaminadas por el Instituto Nacional Electoral (INE). Una vez verificadas las firmas, las reformas de ley son turnadas a las comisiones correspondientes para su análisis.

 

Ante esta situación, la senadora panista, explicó que las iniciativas ciudadanas deben tener el carácter de preferente en su discusión, “ya que son el resultado de un esfuerzo ciudadano, cuya voz debe estar blindada contra la posibilidad de que ni siquiera sean discutidas y principalmente porque dichas iniciativas manifiestan la voluntad y necesidades del pueblo”.

 

Lo que se busca con esta propuesta, dijo, es fomentar el involucramiento entre los particulares, asociaciones civiles y la sociedad en general, así como hacer valer los instrumentos de participación ciudadana con los que cuentan, además de obligar a las Cámaras a que una vez que hayan acreditado que las iniciativas ciudadanas cumplen con los requisitos de ley, sean forzosamente discutidas.

 

En opinión de la senadora de Acción Nacional “parece absurdo” que únicamente sea el titular del Ejecutivo federal quien cuente con la exclusiva atribución de presentar iniciativas preferentes, siendo que una iniciativa ciudadana viene apoyada con un mínimo de 106,561 firmas debidamente acompañadas con la clave de elector de cada firmante.

 

Ésta, añadió, es causa suficiente para que la demanda popular que contiene la iniciativa ciudadana sea escuchada y discutida de forma inmediata por el Congreso de la Unión.

 

El carácter preferente obliga a las Cámaras a discutir las iniciativas dentro del plazo improrrogable de 30 días naturales después de su presentación.  Otorga plazos más expeditos para la emisión de opiniones y elimina la posibilidad de que las iniciativas sean mandadas a lo que comúnmente se conoce como “la congeladora”.

 

Requisitos para presentar iniciativa ciudadana

 

–       Tiene que ser respaldada por al menos el 0.13% del electorado, lo que equivale a alrededor de 100,000 personas.

 

–       Podrán ser recibidas por cualquiera de las cámaras legislativas, y una vez que éstas lo hagan, tendrán que solicitar al Instituto Nacional Electoral que verifique la autenticidad de las firmas y los documentos de los promotores.

 

–       El INE tiene hasta 30 días para cumplir el requisito de revisión.

 

–       Si el INE concluye que una iniciativa ciudadana incumple con los requisitos, informará a la cámara correspondiente para que la deseche.

 

–       En caso de que el INE determine que la iniciativa ciudadana cumple con los requisitos, notificará a los legisladores para que la turnen a comisiones para su análisis.

 

–       Durante la discusión del dictamen, un representante de los promotores podrá asistir a las sesiones y dar su opinión, aunque ésta no será vinculante.