WASHINGTON. Estados Unidos acudirá a la cumbre sobre los refugiados convocada por la ONU en septiembre con el objetivo de buscar un aumento del 30 % en la ayuda financiera y duplicar el número de reasentados, según informó la Casa Blanca.

 

En un comunicado, la principal asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Susan Rice, detalló que EU, con el presidente Barack Obama a la cabeza, será uno de los coanfitriones de la cumbre junto con Canadá, Etiopía, Alemania, Jordania, México y Suecia.

 

A principios de esta semana, la embajadora de EU ante la ONU, Samantha Power, se reunió con representantes de esos países en Naciones Unidas, con quienes se comprometió a “trabajar estrechamente para promover los objetivos de la cumbre”, según Rice.

 

“Con 20 millones de refugiados en todo el mundo, un esfuerzo internacional colectivo e integral para reforzar la protección y asistencia de esos refugiados es más crucial que nunca”, enfatizó la asesora de Obama.

 

Por ello, uno de los objetivos de EU en esa cumbre será lograr un aumento del 30 % en la financiación global y de organizaciones internacionales que asisten a los refugiados.

 

Además, el Gobierno de Obama quiere “duplicar” el número de refugiados reasentados y de aquellos que tienen “canales legales de admisión”, de acuerdo con el comunicado.

 

Otra de las metas es incrementar hasta un millón tanto el número de refugiados que asisten a la escuela como el de los que tienen derecho a trabajar.

 

“Alcanzar estos ambiciosos objetivos será un reto. Sin embargo, el nivel de necesidad no exige menos”, subrayó Rice.

 

La ONU calcula que son 20 millones las personas que están actualmente refugiadas en países distintos al suyo por los conflictos armados en su nación de origen y, además, hay otros 40 millones de desplazados internos que también escapan de la violencia.

 

Unido a ello, cerca de 244 millones de personas se han visto obligadas a cruzar las fronteras buscando nuevas oportunidades económicas porque en sus países de origen el subdesarrollo y la pobreza les impiden una vida digna.

 

A la cumbre de septiembre convocada por la ONU se espera que asista un centenar de jefes de Estado y de Gobierno. |DEC