Tlaxcala está por terminar de manera exitosa su temporada de “avistamiento de luciérnagas” a mediados del mes de agosto, este es un evento que está dando la oportunidad a este estado de salir un poco del anonimato turístico, ya que sin duda este nuevo producto ecoturístico se está convirtiendo en una gran imán para el turismo.
Este fenómeno natural tiene como principal escenario los bosques de oyamel de las regiones de Nanacamilpa y San Felipe Hidalgo, cuando una especie de luciérnagas endémica de esa región regala hermosos espectáculos. Son las luciérnagas de Tlaxcala quienes últimamente están sacando la cara por el turismo del estado más chico de nuestro país. Hay un boom, un especie de furor por acudir a observarlas.
La industria turística tlaxcalteca se está viendo beneficiada con este novedoso producto, que aunque el fenómeno natural lleva millones de años ocurriendo en sus bosques, apenas hace unos 5 años que se dio un boom en turismo, mismo que genera buenos recursos a sus habitantes, la mayoría ejidatarios. Hace tres años no había más de seis santuarios de luciérnagas hoy son más de treinta, lo cual habla del éxito momentáneo que tiene este evento natural.
Durante el mes de Julio, Enrique de la Madrid, Secretario de turismo Federal, anunció que se han destinado cerca de 300 millones de pesos en los primeros tres años de la presente administración al estado de Tlaxcala, esto para el desarrollo del turismo y la cultura de la entidad, y para este 2016 se prevé un monto de 21 millones de pesos más, para beneficiar a cerca de tres mil 600 prestadores de servicios turísticos y de 116 empresas ahora certificadas.
El gobierno de Tlaxcala, está haciendo un esfuerzo para consolidar al estado, como un destino cultural y ecoturístico, y desde 2011 al 2015 se han destinado, en coordinación con el Gobierno federal, más de 40 millones de de pesos en este rubro. Durante los últimos 5 años el estado ha incrementado el 68 por ciento la oferta de hospedaje. Actualmente Tlaxcala cuenta con 109 hoteles, 14 centros ecoturísticos con cabañas y 12 haciendas que ya prestan sus servicios a los turistas.
Sin duda el Santuario de Lucièrnagas puede consolidarse como un producto turístico que puede empujar a la industria turística del estado, me parece que Tlaxacala puede aportar más, sobre todo dirigirse al enorme pastel que representan los millones de turistas que van desde la Ciudad de México, mayormente aprovechados por el estado de Puebla. Tlaxcala tiene enormes oportunidades en sus tradiciones ancestrales, es un estado con amplia vocación taurina, con emocionantes pueblos con encanto, majestuosas haciendas y una Ruta del Pulque que no le pide nada a las rutas de viñedos, de mezcal o tequileras de otras regiones de México.
Hay que cuidar mas las zonas boscosas de la depredación humana propiciada por la visita en masa del turismo que acude a ver a las luciérnagas, eso y aumentar la oferta hotelera, aumentar la oferta de producto turístico y difundirlo por todas partes es una tarea que Tlaxcala tiene que hacer ya.