En Costa Rica, autoridades encontraron a un gato que intentaba ingresar teléfonos celulares a una prisión, considerada de las más grandes del país.
Por más de cinco horas, guardias de seguridad intentaron atrapar al felino que corría por pasillos y trepaba por los tubos mientras portaba una pequeña bolsa de plástico color negro atada a su lomo, sin embargo, logró refugiarse en una alcantarilla.
Los elementos de seguridad tuvieron que esperar pacientemente a que el peludo animal saliera y poder detenerlo.
Cuando lograron atraparlo grabaron el momento en que desprenden la bolsa que portaba, donde descubrieron dos teléfonos celulares, un cargador y un chip.
Esta no es la primera vez que sucede un caso similar, pues delincuentes han intentando ingresar objetos prohibidos o drogas por medio de animales.
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