"Me dijo que eso estaba estipulado en lo que cuesta la prenda, y yo wey, eres o te haces. Sabes que no me voy a llevar nada"
Foto: Captura de Video "Me dijo que eso estaba estipulado en lo que cuesta la prenda, y yo wey, eres o te haces. Sabes que no me voy a llevar nada"  

– ¡¿Ahora quién podrá defenderla?!, así podría subtitularse la triste historia de #LadyProfeco, quien fue víctima de una perversa corporación y sus esbirros mexicanos que intentaron cobrarle en Euros una prenda que ella asumió que estaba en pesos.

Incluso, los intransigentes empleados de la tienda ubicada en Metepec, Estado de México le negaron la ilusión de llevarse una bolsa gratis -pues no tenía precio en la etiqueta- ya que al escanear el código aparecía el precio. Pobrecita.

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Ante esta monumental injusticia, #LadyProfeco urgió a todos los que han sido víctimas, como ella, «a armarla de pedo», por lo que, mientras alguien maneja el auto en el que ella viaja y se toma su bebida de la cadena de café de la sirena, para calmar la indignación que le provoca que los empleados «no se pongan pilas».

En la narración de los escabrosos hechos de los que ella es una superviviente, señala que en el artículo 7 de la Ley Federal del Consumidor se específica que los proveedores están obligados a exhibir de forma notoria los precios de los productos, y para reforzar su argumento ella comparte la foto que subió a su Insta donde se ve, clarito, ahí sin filtros, el precio… en Euros; y para que la cuña apriete arroba a Profeco y a pide «jelp» a sus amigos abogados.

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Y, si no fuera esto suficiente calvario para ella, al final del día y de no poder comunicarse con esos empleados que no «se ponen pilas», les exige que le respeten el precio en Euros y que hagan la conversión a pesos, por lo que el intolerante empleado que la atendió le dijo que serían alrededor de 600 pesos, por lo que ella compartió con altivez y dignidad -que no tiene precio-:

«Me dijo que eso estaba estipulado en lo que cuesta la prenda, y yo wey, eres o te haces. Sabes que no me voy a llevar nada».

 

AR