La posición económica de las familias mexicanas influye de manera directa en la posibilidad de acceder al agua potable, revela una encuesta realizada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Púbica (Cesop) de la Cámara de Diputados.

 

El ejercicio vía telefónica y cuyos resultados son representativos a nivel nacional, sostiene que entre menor sea el ingreso familiar de una persona, existe una mayor posibilidad que le falte el suministro de agua diario o casi diario.

 

“Entre los entrevistados con ingreso de menos de mil 500 pesos (al mes), 21% reporta que le hace falta agua diario o casi diario; (mientras que) entre los que ganan más de 12 mil pesos (al mes) este porcentaje se reduce a 9%”, señala el reporte del Cesop.

 

El estudio, realizado en el marco del Foro Agua: escases y riesgos, llevado a cabo ayer en el recinto de San Lázaro, dio a conocer también que mientras mayor sea el ingreso de la familia hay una menor percepción de su costo.

 

“Mientras que entre las personas con un ingreso familiar mensual es menor a los mil 500 pesos, 32% dice que el costo es alto; entre los que ganan más de 12 mil mil pesos, sólo 15% comparte esta opinión”, argumenta el Centro.

 

Sin embargo, a fin de mejorar el suministro del vital líquido, el centro que dirige Rafael Aréstegui Ruiz, descubrió que la mayor parte de la sociedad mexicana no está dispuesta a pagar más por el servicio y el consumo del agua.

 

Explica que 54% de los 631 entrevistados por el Cesop respondió que no estaría dispuesto, mientras que 38% de los ciudadanos consultados respondieron de manera afirmativa; 68% consideró que el precio del líquido es barato y 26% que percibe que el precio es excesivo.

 

Sobre las costumbres para ingerir el agua, los datos recabados resaltan que 72% de la población lo hace a través de productos envasados o por medio de garrafón, mientras que 12% lo hace a través de filtros, sólo 6% la hierve y 9% lo hace directo de la llave.

 

Ante desastres

 

Sobre las políticas adoptadas por los gobiernos (federal y estatales y del distrito federal) cuando se registra una inundación, la percepción de 31% de las familias es que las administraciones apoyan “mucho o algo” a los damnificados, mientras que 62% respondió que hacen “poco o nada”.

 

En este sentido, la secretaria de la comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, Jacqueline Argüelles Guzmán, sostuvo que los tres órdenes de gobierno deben diseñar e implementen medidas preventivas y de adaptación a fin de prevenir los efectos del cambio climático.

 

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