Por cuatro años consecutivos, Norberto Ronquillo Hernández asistió a la Universidad del Pedregal, donde cursaba el octavo y último semestre de la carrera de Mercadotecnia Internacional.
Sin embargo, aunque este joven originario de Chihuahua, quien era el más entusiasta en los preparativos para festejar que ya concluían sus estudios profesionales, no asistió a la entrega de diplomas la semana pasada. Sus compañeros decían: “falta uno”, nos falta Norberto.
Lo que sucedió fue que el martes 4 de junio lo secuestraron al salir de la escuela. Y como señaló el rector de esa universidad, Armando Martínez Gómez, todos sus amigos se avisaron que habían llegado, como era su costumbre, menos él. Un par de horas después, sus familiares recibieron la primera llamada para pedir rescate y sus primos, con quienes vivía Norberto, denunciaron ante las autoridades.
Martínez Gomez dijo que después de la denuncia pasaron 72 horas para que se empezara a investigar, por lo que consideró que con una actuación rápida, con cámaras y tecnología, y si no se hubiera aplicado la burocracia, tal vez otra historia sería.
Hoy las autoridades informaron del hallazgo del cuerpo del joven en Xochimilco, quien había sido reportado como secuestrado y cuyo rescate fue pagado por sus familiares.
En la Universidad del Pedregal, localizada en el sur de la Ciudad de México, en la exhacienda San Juan Huipulco, alcaldía Tlalpan, se organizó una misa en memoria de Norberto, que empezó a la 12:00 del día y terminó poco después de las 13:00 horas.
Sus compañeros, tanto amigos que compartieron el salón de clases como quienes por alguna otra razón interactuaban con él, como Gaby y Roberto, decían que Norberto sobresalía por su alegría y ambilidad.
En la misa que ofició el padre Davide Tonini, sus amigos y familiares se sentaron en la primera fila, inconsolables, sin dejar de llorar. Algunos guardaban la esperanza de volverlo a ver después de que lo liberaran.
Al concluir la ceremonia religiosa, su hermano Aarón, su novia Jennifer Rosenfeld, su amigo Joseph y otros compañero, ofrecieron unas palabras.
“No sé cuales eran los planes de Dios con mi hermano… agradezco mucho a sus amigos, a los directivos de esta universidad, que a pesar de que esta ciudad cuenta con mucha gente mala, también cuenta con gente con corazón puro, mi familia estará eternamente agradecida con ustedes….”, dijo Aarón antes de que el llanto le impidiera continuar, al igual que a Jennifer y a Joseph.
El lugar que fungió como altar para llevar a cabo la misa se llenó de flores blancas, coronas de luto; el padre Davide también expresó unas palabras por la pérdida e invitó a todos a resignarse.
Al concluir la misa, el rector Armando Martínez comentó que en julio se llevará a cabo una ceremonia para la entrega póstuma del título de licenciatura de Norberto.
Informó que se ha dado apoyo psicológico a los compañeros del joven, y además ha tenido comunicación con rectores de universidades privadas para implementar protocolos de seguridad y fortalecer las acciones afuera de los planteles.
«Se convocará a rectores de universidad y de nuestras federaciones para que en el momento en que reciban una llamada, no se esperen a levantar una denuncia penal, sino que en ese momento se activen todos los protocolos, los seguimientos de las caras. Total, es mejor ver que no fue cierto a tener un hecho lamentable, como Norberto, que hoy está muerto”, apuntó el rector.
CS