Además de dejar caos vial y afectaciones peatonales, La manifestación en el Ángel de la Independencia, el cerco y las protestas realizadas afuera del Senado en contra de la reforma energética también trajeron consigo altos niveles de contaminación auditiva debido al ruido generado por parte de las manifestaciones en contra de los trabajos legislativos.
El golpeteo a las vallas metálicas, así como el uso de bocinas bafles –mismas que se utilizan para conciertos y eventos públicos masivos-, afectó y alteró la cotidianeidad de clientes, empleados y visitantes, quienes se quejaron por los altos niveles de ruido, pues tan sólo de un costado del monumento colocaron 12 bocinas, de las utilizadas para los conciertos masivos.
En un sondeo realizado por 24 HORAS a varios de los comercios, colegios y hoteles aledaños al Ángel de la Independencia, diversos empleados se quejaron que debido al constante escándalo de los manifestantes, varios trabajadores sufrieron dolores de cabeza y cuadros de estrés.
En escuelas de computación e inglés los horarios de clase fueron alterados, debido a que el ruido no les permitía interactuar con los profesores.
Quienes más sufrieron los estragos de los altos decibeles de las bocinas colocadas en el Ángel de la Independencia fueron los huéspedes en los hoteles aledaños, pues empleados de varias de estas cadenas de hospedaje aseguraron que algunos de los turistas se quejaron por no poder dormir y, en algunos casos, prefirieron cambiar de hotel.
En otros casos, algunas reservaciones se cancelaron pues muchos de los extranjeros se desalentaron al ver el escenario en las inmediaciones donde se hospedarían.
El cerco en el Senado
Otra de las quejas de parte de los gerentes de los establecimientos es que las ventas cayeron de una manera catastrófica, en aproximadamente 60% no solamente para las tiendas o restaurantes fuera del cerco, sino también aquellos que por colindar en las calles vecinas al Senado tuvieron que ser “acuartelados” sin su previo consentimiento.
También los policías federales encargados de resguardar las calles cercanas al Senado sufrieron de migrañas, esto luego de soportar las más de 12 horas de protestas, golpes y “cucharazos” de parte de los simpatizantes de Morena. Incluso algunos elementos de las fuerzas públicas tuvieron que acudir a Servicios Médicos para que les recetara algún analgésico para calmar los dolores auditivos.
Además del ruido, las agresiones verbales son otra de las constantes por parte de los manifestantes. Los empleados afirmaron que durante los días que duró el cerco y en su transcurso para llegar al trabajo, se encontraron con insultos y burlas por parte de los simpatizantes del PRD, quienes sin argumento alguno los agredían.
Dato
Desde el Ángel de la Independencia, el PRD emprendió sus “75 horas de caminata en defensa del petróleo”. La jornada comenzó el lunes a las 10:00 horas y concluirá hoy a las 13:00 horas.
Pérdidas por 80 millones de pesos
El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en pequeño de la Ciudad de México (CANACOPE), Gerardo López, señaló que por los 10 días del cerco realizado en el Senado se perdieron alrededor de 80 millones y apuntó que las ventas han bajado en un 90% en la zona.
Aseveró que otras de las afectaciones que se han tenido es que las tiendas están mal surtidas porque no se les ha permitido a los camiones y a los surtidores entregar las mercancías, y agregó que en los restaurantes, los alimentos en refrigeración se han echado a perder porque la demanda ha bajado.
Alertó que los eventos de fin de año, tales como desayunos, comidas y cenas características de estas fechas, tuvieron que ser cancelados aun cuando había las reservaciones se había hecho desde hace meses atrás.
Respecto al ruido hecho por los manifestantes, Gerardo López añadió que sólo se trató de un acto intimidatorio más allá de una protesta en contra de la reforma energética, y que lo alto del volumen de la música y las consignas afectó considerablemente el ritmo de vida de los residentes de esa zona sitiada.
"Nosotros hemos expresado que esto es una mentira y que haya sido un cerco pacífico, es un cerco de violencia, de agresión verbal, de desastre económico en lo que fue al interior del cerco, y hay una responsabilidad en sus dirigentes en la convocatoria que hicieron”
Gerardo López
Presidente de la Canacope