Convertido en un auténtico héroe deportivo, Oribe Peralta, el delantero del Santos Laguna que se convirtió en la figura de la Selección Mexicana en la difícil etapa del repechaje para conseguir el boleto al Mundial de Futbol Brasil 2014, no estuvo exento de la preocupación que muchas familias sufren en La Laguna porque alguno de sus miembros es víctima de la violencia, según reporta el diario local Vanguardia.
Durante el tiempo de la concentración previo para enfrentarse a la Selección de Nueva Zelanda, la familia de Oribe Peralta, originaria de Ejido La Partida, de Torreón, dividió su preocupación entre el desempeño del ganador de la Medalla de Oro de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y uno de sus tíos.
En esos días un comando de presuntos sicarios interceptó y despojó de su vehículo a un tío de Peralta, un médico que dirige una institución médica en el municipio de San Pedro y cuyas señas particulares no se publican por razones de seguridad.
Fuentes policiacas, cercanas a la investigación del caso, confirmaron que el pariente del delantero se quedó sin su unidad, cuyas características y situación actual no se detallan para no entorpecer las indagatorias correspondientes.
El médico, tío del crack, está en buen estado de salud.
El caso de la familia del futbolista mexicano del momento coincide con lo que ésta semana presentó el Centro de Investigación México Avanza, tras realizar el Barómetro Estudio de Opinión Pública, el cual reveló que el 62 por ciento de los torreonenses no muestra esperanzas en que la situación de seguridad pública mejore en la Comarca.
Los entrevistados, de hecho, no consideran como una buena opción comprar una casa, instalar un negocio o desarrollar vida cultural en la Región Lagunera. (Con información de Vanguardia)
