El presidente Enrique Peña Nieto advirtió one more time –ahora en la sede de la Organización de las Naciones Unidas–, que ante las crecientes desigualdades, con una crisis económica mundial que no cede y con la frustración social que esto provoca, el mundo está expuesto a la amenaza de nuevos populismos, tanto de izquierda como de derecha, pero que al final de cuentas son riesgosos por igual.
El primer mandatario recordó que el siglo pasado ya vivió y padeció las consecuencias de individuos que, carentes de entendimiento, responsabilidad y sentido ético, optaron por dividir a sus poblaciones. No vamos a hacer la lista de los populistas del siglo XX que pulularon en Latinoamérica, incluyendo México, porque cada vez que nos acordamos de un par de personajes hasta dan ganas de llorar, pero sí podemos decir que dejaron al país “para el arrastre”.
Por eso, Peña Nieto insistió en que las sociedades deben estar alertas frente a quienes se aprovechan
de sus miedos y preocupaciones, ante los que siembran odio y rencor, con el único fin de cumplir agendas políticas y satisfacer ambiciones personales. En esta segunda década del siglo XXI, “no debemos repetir los errores que tanto dolor causaron al mundo en el pasado”, subrayó el Presidente. Y tiene razón, porque no se vale tropezarse dos veces con la misma piedra.
En la misma intervención durante el Debate General de la 70 Asamblea de la ONU, Peña Nieto reiteró el llamado a todas las naciones del mundo para actuar con decisión y visión de futuro frente al cambio climático. Si no “agarramos al toro por los cuernos”, nos vamos a acabar el planeta, quiso decir.
También hizo un llamado a no ser indiferentes ante el sufrimiento de poblaciones enteras. “Nuestro presente está marcado por el movimiento migratorio de millones de personas, que buscan mejores condiciones de vida. Lamentablemente, en todos los continentes, en todas las latitudes, los migrantes viven historias de riesgo, rechazo, discriminación y abuso. Estas condiciones se agravan cuando por ignorancia, mala fe, racismo o mero oportunismo político, los migrantes y sus hijos son estigmatizados y responsabilizados de las dificultades propias de los países de destino.
No permitamos que continúe esta injusticia… Frente a esas visiones de exclusión y discriminación, debemos sumar esfuerzos para crear un esquema mundial de protección a los derechos del migrante, a la altura de los desafíos que estamos viviendo. En todo el orbe, millones de migrantes necesitan una respuesta colectiva y efectiva; una respuesta global que debe surgir desde la Organización de las Naciones Unidas”. ¡Urge, urge!, podrían exclamar los cientos de miles de desplazados por las guerras y otros conflictos.
AGENDA PREVIA
El secretario de Agricultura, José Calzada Rovirosa, parece haber instituido los “martes de toros”. ¿Y qué tiene que ver la fiesta taurina en esta dependencia?, preguntan los agroyuppies. Pues nada, efectivamente, pero por lo menos los dos últimos martes, el de la semana pasada y hoy, los ha ocupado para anunciar sendas “corridas” de funcionarios.
La semana pasada se deshizo del subsecretario de Agricultura, Jesús Aguilar Padilla, y lo sustituyó por Jorge Armando Narváez Narváez.
La “corrida” del martes 15 de septiembre la difirió, por obvias razones, para el jueves 17, y en ella anunció el “corte de coleta” de Marcos Bucio, oficial mayor de la “ganadería” de Enrique Martínez; ese mismo día “regaló” un toro engordado con clembuterol: Juan Manuel Verdugo Rosas, subsecretario de Desarrollo Rural a quien finalmente llevaron al matadero.
Para la “corrida” de hoy está considerado el titular del Órgano Interno de Control (OIC), Francisco Cárdenas, impuesto por el entonces oficial mayor, Marcos Bucio para que le cuidara “el ganado”.
Para el próximo martes, los encargados de preparar los carteles anuncian la despedida del director del Fideicomiso de Riesgo Compartido (FIRCO), Carlos Robles Loustaunau.
Y eso que el secretario Calzada apenas lleva un mes en el cargo, ¿eh?