Faltan pocos días de la Cumbre Iberoamericana 2014 en Veracruz y los cuerpos diplomáticos ya cabildean temas a fin de que la reunión no se quede en una muestra de buenas intenciones. Entre los asuntos a debatir está la creación de un sistema de arbitraje privado para resolver conflictos entre empresas de manera más ágil. De acuerdo con fuentes cercanas a la oficina de la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, también se espera cerrar un programa para facilitar la movilidad de estudiantes entre los países que conforman la cumbre.
Un buen número de diputados federales de todos los partidos preparan ya su salida para poder contender por alguno de los puestos de elección popular que se disputarán el próximo año. En los pasillos de la fracción del PRD, que dirige Miguel Alonso Raya, se rumora que Aleida Alavez fue borrada de la lista del sol azteca. Se dice que hay molestia por las medidas radicales que ha impulsado la legisladora, quien incluso se llegó a perfilar para presidir la Cámara pero perdió la carrera con Silvano Aureoles. La división continúa al interior del partido que abandonó hace algunos días Cuauhtémoc Cárdenas.
Al PRD no le va bien en el Senado tampoco. El coordinador de la fracción, Miguel Barbosa, parece estar perdiendo a su rebaño, pues nada gustó que en respuesta inmediata al anuncio del presidente Peña Nieto sobre el envío de un paquete de iniciativas en materia de seguridad, llamó de inmediato a iniciar trabajos e incluso propuso convocar a extraordinario. Los legisladores de su bancada, por el contrario, ya empiezan a reclamar que se pretenda entretener al Congreso en meras ocurrencias que no resolverán los problemas del país.
Las autoridades mexicanas están en alerta luego de que la Administración Nacional de Seguridad Vial de EU detectara fallas con las bolsas de aire fabricadas por la japonesa Takata para varias armadoras. La Secretaría de Economía, que encabeza Ildefonso Guajardo, y la Profeco, que lleva Lorena Martínez, están en contacto con la empresa y con los productores automotrices en el país para conocer los vehículos que pudieran presentar fallas y, de ser necesario, hacer llamados a revisión, de los que tendría que responsabilizarse la firma japonesa.
