Selena Gomez se convirtió en el centro de la polémica tras publicar un video donde, entre lágrimas, hablaba sobre su preocupación por la situación de los inmigrantes indocumentados en Estados Unidos. En el clip, la cantante lamentaba las deportaciones masivas y mostraba su solidaridad con la comunidad latina, un mensaje que conmovió a muchos, pero que también generó fuertes críticas, entre ellas, las de Alicia Machado.

A través de Instagram, la exMiss Universo reaccionó de manera despectiva al video de la cantante, burlándose de su español y haciendo comentarios sobre su  apariencia física. “¡Muchacha pendeja! Ya póngase a estudiar español y al gym, mija, al gym”, lo que de inmediato desató la indignación de los seguidores de Selena.

Las redes sociales no tardaron en recordarle a Machado que ella misma fue víctima de bullying y comentarios ofensivos sobre su peso cuando ganó el certamen de belleza, especialmente por parte de Donald Trump, quien la llamó Miss Piggy y la obligó a hacer ejercicio en público.

A pesar de las críticas, Alicia no se retractó en un primer momento, por el contrario, reafirmó su postura. En entrevistas posteriores, la también actriz explicó que no intentaba insultarla, sino que simplemente consideraba que, si la cantante deseaba representar a la comunidad latina, debía mejorar su español y proyectar una mejor imagen. “No la estoy ofendiendo, sólo digo que si va a hablar en español, que lo haga bien”, comentó. Además, aseguró que las personas que la criticaban lo hacían por envidia. Sin embargo, la presión en redes sociales aumentó rápidamente, y Machado comenzó a recibir una avalancha de ataques y hasta amenazas.

Esto la llevó a restringir los comentarios en sus publicaciones y, poco después, a cambiar su discurso. En un intento por calmar la situación, la exreina de belleza admitió que su actuar pudo haber sido un error. “Si alguien se sintió ofendido, lo lamento”, dijo, aunque sin ofrecer una disculpa directa a Selena Gomez.

Este episodio ha generado un debate sobre el impacto de las palabras de figuras públicas y la responsabilidad que tienen al hablar de temas delicados como la apariencia física y la identidad cultural.

Tras la audiencia en la que Rodolfo Fofo Márquez fue sentenciado a 17 años y seis meses de prisión por tentativa de feminicidio. Su hermano, Rodrigo reaccionó con evidente molestia al salir del Penal de Barrientos, acompañado de su madre, evitó dar declaraciones a la prensa.

Ante la insistencia de los reporteros, realizó un gesto obsceno y exclamó: “Ya cabrones, ya estuvo bueno, basta”. Este comportamiento fue captado en video y rápidamente se difundió en redes sociales, generando diversas reacciones.

Tengo un pendiente, ¿la familia Márquez se dará cuenta de que sus actitudes no les ayudan?, ya que, de por sí, la mayoría de la gente está en su contra.

Hay más... pero hasta ahí les cuento.

 

FACEBOOK  y YOUTUBE Ana María Alvarado

IG y TW @anamaalvarado

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