Este viernes se estrena la cinta Una última y nos vamos, donde una de los productoras es Martha Higareda, quien logró reunir a un gran elenco. Platiqué con ellos y coinciden en señalar que aceptaron hacerla porque es una historia de corte familiar que rescata los valores de la unión, el compañerismo y la solidaridad, entre otros.
Héctor Bonilla confiesa que de todas las películas que ha hecho, en ésta se sintió muy a gusto y disfrutó la filmación porque hay música mexicana y promueve el amor de padre a hijo, entre hermanos y entre amigos.
Martha señaló que es la tercera película que produce y uno de sus sueños era trabajar al lado de Bonilla, así que, sin duda, está orgullosa con el resultado. Actualmente ya trabaja en la producción de otra cinta, con el título tentativo de Pura sangre, que será un thriller psicológico, pues dice que ha hecho puras comedias y ahora quiere incursionar en otro género.
Mariana Treviño ha demostrado su talento en cada personaje que le encomiendan, y en Una última y nos vamos demuestra su calidad como actriz, ya que tiene un personaje muy simpático que le da vida a la historia y al grupo de mariachis. Actualmente participa en la puesta en escena Nunca es tarde para hablar francés, donde ha recibido muy buenas críticas por su participación.
La historia es sencilla: un grupo de amigos que viven en un pueblo, en sus buenos tiempos fueron famosos porque cantaban en un grupo de mariachis; pasa su época y cada uno se dedica a diversas actividades, hasta que tienen que volver a reunirse para ir a un concurso de mariachis, pues su deseo es ganar el premio. De ahí pasan por una serie de aventuras que provocan la risa en los espectadores.
En el elenco están Hernán Mendoza, Alejandro Calva, Mauricio Arguelles, José Sefami, Ernesto Loera, Silverio Palacios y Claudia Bollat, bajo la dirección de Noe Santillán.
Martha está consciente de que hay que hacer una amplia publicidad para que las películas triunfen y por eso en estos días no ha parado de hacer promoción. Espera que la película sea bien recibida, pues le parece que es una historia redonda, sencilla y con la que pasas un buen rato. Ya ustedes me darán su opinión cuando la vean. A mí me pareció buena, pero no espectacular, graciosa por momentos, escuchas buena música, disfrutas de bellos paisajes y te entretiene sin ser algo fuera de serie. Lo que más me gustó fue el puerquito, que es la mascota de uno de los mariachis.
Hay más... pero hasta ahí les cuento.