La salida de Luis Videgaray provocó un sismo en el gabinete y advierten que tendrá réplicas en otras dependencias; es decir, habrá más cambios. La ruta crítica de esta estrategia tiene dos ejes: fortalecer la figura del primer mandatario, en la última etapa de su gestión; y recuperar la imagen del PRI tras la derrota del 5 de junio pasado, sobre todo porque ya pasaron dos meses y su dirigente, Enrique Ochoa, no ha podido nombrar a los integrantes del CEN. Lo que se quiere impedir es que el presidente Peña y Ochoa lleguen débiles a la Asamblea Nacional tricolor y, por ende, a la sucesión presidencial de 2018. ¿Será?
Cambio de operador
Con el nombramiento de Luis Miranda como titular de la Sedesol, el control de la operación política del Gobierno federal dejó de estar en la Secretaría de Gobernación. Pasó a una institución muy noble y con una bolsa llena de recursos. Lo único malo es que a don Luis, todo mundo le conoce sus modos y necesita cuidar mucho las formas para no pegarle a la imagen de su jefe, el Presidente de la República, porque lo estarán vigilando con lupa. Donde no cayó nada bien este nombramiento, nos dice gente de gobierno, fue en Bucareli, allá donde despacha Miguel Ángel Osorio Chong. ¿Será?
Ayuda
Manlio Fabio Beltrones sí recibió un ofrecimiento para incorporarse al gabinete presidencial, pero de manera muy comedida y en extremo político dijo que “por ahora no, gracias”. Y es que para el Jefe del Ejecutivo federal tener al sonorense de su lado le daría un bono de gobernabilidad y credibilidad. Le ayudaría a recuperar parte de la confianza que ha perdido entre la clase política y otros actores de la sociedad. Lo cierto es que muy pocos saben a ciencia cierta en qué anda Beltrones y un puesto en el gabinete lo mantendría muy ocupado. ¿Será?
Expectativas
El regreso de José Antonio Meade a la Secretaría de Hacienda fue aceptado con gran beneplácito por varios sectores, entre ellos los empresarios e industriales que, desde hace algunos años, sólo recibieron portazos en esa dependencia. Hay muchos temas pendientes por resolver y esperan que la sensibilidad que caracteriza a Meade se mantenga para atender temas como la devolución del IVA a los industriales de los alimentos. ¿Será?