Su comparecencia terminó con una sonrisa. Y es que lo que menos se esperaba Ildefonso Guajardo es que, en lugar de los gritos y sombrerazos que recibió Luis Videgaray en el pleno del Senado, él no sólo fuera comedidamente tratado en comisiones, sino que además le hicieran algunos encargos.
Vaya, el trato -aun de los panistas- más bien parecía de cuates… o con ganas de llegar a serlo. Y si no, pregúntenselo a Héctor Larios, quien ayer cerró la participación del secretario de Economía con varios encargos:
Primero, proponiéndole otros encuentros, y que algunas de las veces éstos pudieran ser privados y no sólo mediáticos.
Luego, solicitándole su intervención para evitar la afectación de los pequeños abarroteros y de los cañeros con el aumento al impuesto de los refrescos y pensar, en cambio, en un gravamen al azúcar.
Le contaría el panista a Guajardo que esos pequeños abarroteros -que es la fuente de autoempleo más importante del país- están muy preocupados por la posibilidad de que bajen las ventas ya que “hasta la mitad” de sus ingresos proviene precisamente de la venta de refrescos.
“¿Por qué no mejor un gravamen al azúcar?”, plantearía el presidente de la Comisión de Comercio. Guajardo escuchó y sonrió.
Tal fue, por lo general, el tono de la comparecencia del titular de Economía. Y si alguna pulla hubo, fue más bien dirigida hacia su cuate Videgaray, como cuando Francisco Búrquez deslizó un “pareciera que la Secretaría de Hacienda no consulta con la Secretaría de Economía” (en referencia a la política económica que está aplicando).
O cuando, en otro momento, el panista preguntó: ¿Usted apoya esas medidas, secretario?
Por lo demás, para todo -o prácticamente todo- Guajardo tendría respuesta. No alborotaría el cotarro y terminó más que sonriente.
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SE ANDAN PASANDO LA BOLITA.- “Es una posición ilegítima esa de andar pasándose la bolita entre funcionarios estatales, municipales y federales… Ahora todos andan en que no se les lastime su prestigio y su posición”
Eso nos comentó ayer el senador Armando Ríos Pitter, al tiempo que en la Secretaría de Gobernación, el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, aseguraba que notificó a tiempo a los gobernadores sobre las tormentas que caerían sobre sus estados.
“No sólo hablé yo con ellos, también el secretario (de Gobernación) les llamó para advertirles…”, aseguraba Puente desde Bucareli.
El guerrerense Ríos Pitter apuntaba a su vez: “Lo cierto es que se rebasó la capacidad de previsión de cualquier autoridad y de entender la magnitud del desastre. Por eso ahora andan repartiéndose culpas”.
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ENVEJECIMIENTO PREMATURO.- Va otro dato de esos que suele regalarnos el INEGI a últimas fechas para documentar nuestro optimismo: Vivimos en México un envejecimiento “acelerado y prematuro”.
Resulta que en 2010 la población de 65 años y más representaba a 6% de la población y para 2016 significará 15%, según estimaciones del organismo.
Ese ritmo de envejecimiento es rapidísimo si lo comparamos con el de otros países: Estados Unidos tardó 69 años en pasar de 6% a 15%, (llegó a éste en 2013) y Francia lo hizo en 115 años (alcanzó ese porcentaje en 1980).
Según la investigadora de la Universidad de Texas, Rebeca Wong, se dice que este envejecimiento es prematuro “porque va antes de que se desarrolle el país"
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LE FALTARON DOS VOTOS.- Ayer fue el último día para Luis González Placencia como presidente de la Comisión de Derechos Humanos del DF. No alcanzó los 44 votos que requería para lograr su reelección (alcanzó sólo 42 de PRD, PT y Movimiento Ciudadano), dado que el PAN, el PRI y el PVEM se opusieron a su permanencia al frente del organismo.
“Lo tiraron los plantones…”, comentarían entre sus allegados, en referencia a algunas declaraciones y comunicados en torno al enfrentamiento que se dio en las calles el primero de diciembre.
Mario Patrón, primer visitador, se quedará provisionalmente al frente de la Comisión, en tanto se elige al nuevo Ombudsman.
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GEMAS: Regalito del secretario de Economía, Ildefonso Guajardo: “El liderazgo del presidente (Enrique Peña Nieto) es tan grande, que una secretaría no puede estar actuando en contra de otra secretaría”.