La cloaca de la Iglesia de la Luz del Mundo, cuyo líder principal, el pervertido Naasón Merarí Joaquín García, purga una sentencia de 16 años ocho meses de prisión en una cárcel de California, Estados Unidos, tras haber sido encontrado culpable en 2022 por abuso sexual de menores, nuevamente se destapó y, nuevamente también, salpica a varios políticos mexicanos. Principalmente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y de Movimiento Ciudadadano (MC), quienes a la luz de los acontecimientos y ante el peso de las evidencias han optado por aplicar la del avestruz: Esconder la cabeza bajo la tierra.

Dos hechos ocurridos en esta misma semana pusieron nuevamente a este grupo delictivo disfrazado de secta religiosa bajo el reflector mediático: en el primero, el martes pasado el autonombrado apóstol Naasón fue informado por una corte federal del estado de Nueva York que será juzgado por conspiración de crimen organizado, lavado de dinero tráfico sexual y explotación infantil, lo que podría derivar en una condena de cadena perpetua.

Y, en el segundo, anteayer en Michoacán, eso aquí en México, fuerzas estatales y federales detuvieron a 38 hombres (37 mexicanos y un estadounidense) que se identificaron como miembros de la Luz del Mundo, al momento que realizaban prácticas paramilitares con réplicas de rifles de asalto porque supuestamente estaban entrenando para el “apocalipsis” (?). Los detenidos revelaron pertenecer a un grupo llamado Jazer, que se encarga de proteger a los jerarcas de esta Iglesia, al igual que sus casas, templos y sus eventos masivos.

Bajo este contexto, por supuesto que se vuelve imperativo voltear a ver hacia la clase política mexicana que por décadas ha apadrinado, protegido y solapado a esta congregación religiosa que en la actualidad, como un verdadero Caballo de Troya, ha logrado infiltrar las más altas esferas del poder a grado tal de que varios de sus miembros ya ocupan posiciones en regidurías, alcaldías, el Congreso de la Unión e incluso en el nuevo Poder Judicial, con Job Daniel Wong Ibarra, flamante secretario auxiliar en la ponencia del ministro presidente de la Suprema Corte, Hugo Aguilar Ortiz, y a quien señalan de ser líder religioso de la Luz del Mundo y empleado directo de Naasón. 

Pero Wong Ibarra no es el único.

De acuerdo a Sharim Guzmán, exintegrante de la Luz Del Mundo y cuya esposa, Sóchil Martín, fue víctima directa de Naasón, también están involucrados los naranjas Enrique Alfaro y Pablo Lemus, exgobernador y actual gobernador de Jalisco, respectivamente. Pero también hay personajes ligados al nuevo Poder Judicial, como lo son Eluzai Rafael Aguilar, Salma Anahí Jaanai y Madián Sinaí Menchaca (hija del obispo Nicolás Menchaca Tristán, quien asumió el liderazgo de la Iglesia tras el encarcelamiento de Naasón); pero también, muchísimos morenistas, destacándose entre ellos el actual secretario de Educación Pública, Mario Delgado Carrillo. Pero hay más… muchos más.

¡Vaya fichitas!