Con la llegada de Ana Lilia Herrera a la Secretaría de Educación del Estado de México se desató una cascada de nombres de posibles aspirantes del PRI a la gubernatura de aquella entidad. Además de la hoy senadora con licencia, subieron a la lista a la presidenta interina del tricolor, Carolina Monroy; al titular de la Profeco, Ernesto Nemer; a los diputados Alfredo del Mazo y Carlos Iriarte, así como al secretario de Salud estatal, César Gómez Monge, y al secretario general de Gobierno, José Manzur. La caballada no está flaca, sólo falta ver de qué cuero salen más correas. ¿Será?
Diagnóstico presidencial
En los próximos días, el presidente Enrique Peña recibirá un diagnóstico pormenorizado de lo que ocurrió el 5 de junio pasado. Le entregarán un análisis de las derrotas del PRI, pero también de los “triunfos” como el de Tlaxcala, donde, a pesar de la victoria del priista Marco Mena, el tricolor tuvo la votación más baja de su historia porque las preferencias se dividieron en tercios. Otro aspecto que plantea el informe, nos adelantan, es que la gente ya no tiene miedo a la alternancia, algo a lo que el PRI le apostó por mucho tiempo, pero que ya no funciona. Es decir, la alternancia llegó para quedarse. ¿Será?
Negociación adelantada
Nos cuentan que ya vieron rondando por el Senado al jefe de ADN. Sí, al ex senador y alcalde de Neza, Héctor Bautista. Y que hasta se reunió con el coordinador de los perredistas, Miguel Barbosa. Lo curioso es que, al parecer, Bautista quiere meter al paquete de apoyo al candidato a presidente del PRD, la coordinación del Senado ¡en 2018! Una negociación muy adelantada. Lo que saltó a la vista es que el mexiquense no tiene empacho en ayudar desde a Alejandra Barrales hasta a Pablo Gómez, siempre y cuando le garanticen ese hueso, perdón, esa posición a su corriente. ¿Será?
Monstruo de mil cabezas
La Asamblea de Barrios, uno de los grupos más radicales de la izquierda en el DF, se ha convertido en un monstruo de mil cabezas. El PRD y Morena la usaron como carne de cañón en conflictos vecinales para invadir predios, bloquear calles y realizar mítines. Hoy no saben qué hacer con ella. El desalojo de un edificio los enfrentó con el jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal. Y el asunto amenaza con terminar en tribunales, pero también con un conflicto que podría generar bajas importantes en Morena. Como reza el dicho: “Cría cuervos...”. ¿Será?