Terminar tantos años de matrimonio es muy difícil, más si aún quieres al marido, así le pasó a Susana Zabaleta, pero después de un año de ausencia de Daniel Gruener, se empieza a ubicar sin él y a sentirse mejor. Pero cualquier separación duele , más cuando buscas conservar una familia.
Finalmente fue Daniel quien decidió irse y Susana pensó que volvería pronto, sin embargo las cosas no se dieron así y con el tiempo se van sanando las heridas y se establece una nueva dinámica de convivencia.
Susana lloró mucho, sin que sus hijos la vieran, pero hoy los disfruta más, tomando decisiones para los 3. Aunque la cantante parece muy abierta, siente que por ahora no puede entablar una amistad con su ex pareja, pero con el tiempo seguro lo logrará.
Susana está tomando clases de yoga y meditación, que le han servido para aprender a soltar y respetar las decisiones de los demás. Le deseamos lo mejor y sin duda tendrá la inteligencia necesaria para salir adelante.
Hay más...pero hasta ahí les cuento.