@guerrerochipres
Al fallecer a los 73 años de edad después de tres décadas de combatir el cáncer, Olivia Newton John nos recuerda que la fugacidad adquiere más sentido cuando de manera vicaria nos identificamos con aquellos que en nuestro nombre cantan, bailan, producen arte o al menos imágenes memorables propagadas por la industria cultural.
La reiteración musical de historias de esperanza y devoción por la pareja habitará muchos años desde la voz de Newton John. De una forma semejante, en el mundo paralelo que son nuestras plazas para el reencuentro y el disfrute del estereotipo y el folclor, somos llamados a actuar y trabajar por ellas, por su recuperación y por su memoria perenne.
Garibaldi y Sandy no están tan lejos como podría pensarse. Son, en sentido abstracto, representaciones culturales que influyen en las muy diversas formas de relacionarnos en este plano humano.
No es problemática la superposición entre la película “Vaselina”, que desde 1978 dejó sembrados modos de disfrutar sobrevivientes a varias generaciones, y la mucho más antigua Plaza Garibaldi: un ambiente festivo que uniera a las familias en torno a nuestros cantos, sonidos y sabores.
Ese ánimo se vio ensombrecido el 14 de septiembre de 2018 cuando la tragedia ocurrió perpetrada por un grupo criminal: tres personas disfrazadas de mariachis dispararon contra un grupo, con un saldo de siete heridos y seis muertos.
El ataque sucedió en el contexto de la disputa por la venta de drogas entre células de grupos antagónicos de esa zona. A casi cuatro años de distancia, Garibaldi cumple este 11 de agosto 101 años. Desde la víspera de su centenario, no ha tenido interrupción el trabajo de inteligencia policial que ha permitido identificar y desarticular a un centenar de pequeños grupos dedicados a la extorsión, venta de droga y robo.
Conversé este mismo martes con la fiscal mexiquense para combate a la Trata de Personas, Guillermina Cabrera. Hablamos de ese ejemplo que da la CDMX y precisamente de las maneras en que la denuncia ciudadana es central no solo para combatir los delitos, sino para generar una conciencia colectiva de recuperación del espacio público de una manera cercana al planteamiento integral que promueve la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien este fin de semana presentó el proyecto de recuperación de Garibaldi.
La cultura popular, estadounidense o mexicana, interpela nuestra disposición a una sentimentalidad construida colectivamente que puede, o no, estar asociada con el tequila y el mariachi, pero que siempre estará vinculada a nuestra memoria, incluso de aquellos que buscarán preguntas y respuestas específicas a por qué nos gustaba Garibaldi o Vaselina.