El 14 de febrero no fue precisamente un día romántico por lo menos en Palacio Nacional. Antes que los chocolates, las rosas y el amor, prevaleció la memoria de Vicente Guerrero. Ese día, Presidencia firmó un decreto para conmemorar el aniversario luctuoso del insurgente que consumó la independencia de este país. 

Para muchos, Vicente Guerrero es un héroe olvidado. Se le menciona en los gritos, pero no tiene la relevancia de Hidalgo o de Morelos. El papel de Guerrero, sin embargo, fue crucial para darle forma al naciente país mexicano. 

Guerrero provenía de una familia con orígenes afromexicanos. Su padre era un mulato arriero de Tixtla, una pequeña población cercana a Chilpancingo. Se dedicó al mismo oficio que su familia y aquella labor lo hizo conocer los caminos de la zona. Ello le resultó de gran utilidad durante la guerra.

Cuando el movimiento de Hidalgo inició, Guerrero se unió a la causa. Morelos se encargó de sublevar la zona sur de la Nueva España, por lo que ahí coincidieron. Luego de la muerte de Hidalgo, Morelos asumiría el liderazgo del movimiento y haría de Guerrero uno de sus hombres más importantes. 

En 1815 Morelos fue capturado y fuisilado. El movimiento insurgente se quedó sin caudillo y poco a poco comenzó a languidecer. Además, la guerra había dañado la economía de algunas regiones y había perdido el apoyo de algunos sectores de la población. 

Para acabar con los pocos insurgentes que quedaban, el Virrey de la Nueva España comenzó a otorgar indultos a quienes se rendían. Muchos aceptaron, aunque Guerrero no. 

Siguió adelante con el movimiento hasta aliarse con Iturbide. Gracias al acuerdo entre ambos, se formó el Ejército Trigarante que entré triunfalmente el 27 de septiembre de 1821 a la Ciudad de México. Un día después se firmó el acta de independecia del Imperio Mexicano.

Resulta curioso que no fuera por las armas, sino por las negociaciones, como México alcanzara su ansiada independencia. Y no deja de ser triste que los dos consumadores de la independencia de México fusilados por los mismos mexicanos.

Guerrero, como cualquier persona, tiene claroscuros. Pero no hoy no les hablaré de ellos. 

Sapere aude!

@hzagal

Profesor de la Facultad de Filosofía en la Universidad Panamericana

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