Tres fechas bastaron a las Chivas Rayadas del Guadalajara para ponerse en pie de lucha en el campeonato de Clausura 2016, golear, ganar y tener un boleto momentáneo a puestos de Liguilla.
Cierto, apenas con el octavo lugar de la calificación, pero es un hecho que era algo impensable apenas semanas atrás, cuando el equipo estaba deprimido y sumido en los lugares más oscuros de la zona porcentual. Hoy, Chivas no ha escapado del todo de la llamada “zona roja”, pero con el paso que lleva seguro que al final del certamen podría estar lo suficientemente lejos para pensar en otra cosa, por ejemplo, el campeonato.
Y todo pasa por la efectividad: nada menos que 10 goles en los últimos tres partidos: tres al Monterrey de visita, cuatro a Pumas en casa, y tres más al Puebla, también de visita, tienen a los rojiblancos con 21 tantos anotados: 10 en 180 minutos, cuando en todo lo que iba del torneo, hasta la fecha 11, apenas habían podido marcar 11 tantos.
Y no podía llegarles el resurgimiento en mejor momento, pues se les viene el clásico ante Atlas, su rival de la región y que es nada menos que el colero del futbol mexicano, con apenas nueve puntos. Sin duda, es un gran momento para que los rojiblancos den un golpe de autoridad que le avise a la Liga que el rebaño está de vuelta y con serias aspiraciones de luchar por el campeonato.
