El exjugador de los Chargers, Max Tuerk, perdió la vida a los 26 años de edad durante una excursión que realizó con su familia. La noticia la dio a conocer su familia, mientras estaba de campamento en el Cleveland National Forest, al norte de San Diego.

«Max amaba a sus compañeros, entrenadores y escuelas», declaró la familia a través de un comunicado. «Max era un hijo y hermano mayor amoroso y su muerte deja un hueco gigante en nuestros corazones».

Tuerk tuvo una carrera brillante como jugador universitario con los Trojans de la Universidad del Sur de California, y por tal motivo fue elegido por los Chargers para llegar a la NFL.

«Con el corazón roto por la pérdida de Max Tuerk», escribió Helton en su cuenta de Twitter. «Increíble persona, compañero y Trojan. Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia».

En su primer año en la NFL no pudo jugar, pues una lesión grave en la rodilla durante su último año colegial, lo mantuvo alejado de los emparrillados. Posteriormente, llegaron los malos momentos para Tuerk, pues fue suspendido cuatro partidos por violar la política de sustancias prohibidas de la Liga.

Después de su paso infructuoso por los Chargers, los Cardinals lo ficharon en 2017, y sólo jugó un partido, para ser cortado en la temporada siguiente.

Tuerk ya estaba retirado desde hace dos años, y hoy el mundo de la NFL perdió a un hombre que era muy querido por todos sus compañeros, y prueba de ello es que las redes sociales mostraron su pesar a la familia del excharger.

LEG