La Conferencia Nacional definió al primer invitado al Super Bowl LIX con la final entre Philadelphia y Washington, en un choque de ofensivas que no decepcionó en el Lincoln Financial Field.
Ante las entregas de balón que tuvo Washington en el juego y en combinación con un poderío terrestre que establecieron las Águilas con Saquon Barkley, Philadelphia confirmó su regreso al Super Bowl tras ganar como locales el título de la NFC y a la espera de conocer a su rival del próximo 9 de febrero en Nueva Orleans.
Un marcador de 55-23 fue suficiente para comandar su pase al Super Domingo con un rendimiento individual que dejó al corredor Barkley como el elemento más importante del partido, al sumar tres anotaciones y 118 yardas en todo el partido.
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Aunque Jalen Hurts cumplió con tres touchdowns individuales en zona roja y una pase con A.J. Brown, las Águilas tuvieron en su corredor estelar al jugador más explosivo con un total de 15 acarreos y un promedio de 7.9 yardas por jugada.
En contraparte a las Águilas, Washington y Jayden Daniels apenas lograron sumar par de anotaciones con el mismo Daniels en una carrera personal y una recepción para Terry McLaurin, pero nunca lograron igualar en intensidad a la ofensiva de Philadelphia, que finalizó el encuentro con 462 yardas en total, por las 350 de los Commanders.
Philadelphia regresa al Super Bowl
Con su victoria número 28 en postemporada y su quinto título de Conferencia, las Águilas regresarán al Super Bowl de la NFL desde la edición que perdieron en la temporada 2022-2023 ante Kansas City, con la oportunidad de sumar su segundo Vince Lombardi en dos semanas.
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Ya con parte de los titulares con descanso al cierre del partido, el corredor suplente Will Shipley logró el séptimo touchdown terrestre para los locales en este juego, que terminó por hundir cualquier posibilidad de reacción para los Commanders.
