Una atleta se presentó en la ronda de clasificación del lanzamiento de bala, este jueves en los Juegos Olímpicos de París, con una máscara negra.
Con los cabellos teñidos de violeta y verde, además de las uñas largas pintadas con los colores de Estados Unidos, Raven Saunders lanzó con esa máscara negra cubriendo por entero su rostro y con gafas de sol.
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La explicación de la estadounidense sobre la máscara negra es que quería atraer la atención y poner el foco en el lanzamiento de bala femenil.
“Quería intentar atraer las miradas, poner el foco en nuestra disciplina”, contó Saunders al término del concurso. “Somos lanzadoras de bala, pero tenemos nuestro propio estilo. Podemos hacer las cosas de manera tan grandiosa como los velocistas y merecemos atención”, reivindicó.
Saunders, que precisa en sus redes sociales que desea ser tratada con pronombres usados para personas no binarias, está muy implicada en la defensa de los derechos LGBTQ+ y la salud mental.
En el pasado ya aprovechó los Juegos Olímpicos para enviar mensajes.
En los Juegos de Tokio 2021 lució una máscara del ‘Joker’ durante su concurso y, al subir al podio, levantó y cruzó sus brazos en forma de “X”, explicando más tarde que quería representar a “todas las personas del mundo que luchan y no tienen una plataforma para hacer escuchar su voz”.
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La atleta regresa de una suspensión de 18 meses, que terminó en febrero de 2024, por haber faltado tres veces a la obligación de estar localizable para controles antidopaje dentro de un plazo de 12 meses.
El miércoles, gracias a su lanzamiento de 18.62 metros, Saunders se clasificó para la final, pero no su compatriota y doble campeona del mundo Chase Jackson, que solo lanzó 17.60 metros.
EAM