El Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Pedro Cholula, Puebla, presenta una sobrepoblación de 304.2 por ciento respecto a su capacidad, lo que ha generado fugas, hacinamiento y conflictos entre los internos, por lo que. Según CNDH tras medio siglo de existencia, las autoridades estatales esperan concretar la construcción de un nuevo penal hacia finales del 2025 o principios del próximo año
De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el penal puede albergar a 119 hombres; sin embargo, 481 reos cumplen su sentencia actualmente, lo que genera ingobernabilidad y que vivan en condiciones inhumanas, que ponen en riesgo la operación del inmueble.
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Precisa que el área de mujeres funciona al límite, debido a que hospeda a 37 internas en los 40 espacios disponibles para la población femenina.
En el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2024, el reclusorio cholulteca obtuvo una calificación de 6.11 de 10 puntos posibles, por lo que fue catalogado en “semáforo amarillo”.
Por ello, lo consideraron el tercer penal con mayor sobrepoblación en la entidad, solo por debajo del penal de San Miguel, en la capital del estado, y del Cereso Regional de la ciudad de Tehuacán.
Además, existe un déficit en la separación entre hombres y mujeres, falta de atención a los derechos humanos de los internos, hacinamiento e insuficiencia de programas para la prevención de incidentes violentos.
El diagnóstico elaborado por la CNDH también destaca la insuficiencia de personal de seguridad y custodia, la presencia de actividades ilícitas y la falta de programas para la prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria, entre otros.
DENUNCIAS DE FAMILIARES
Familiares de los presos han denunciado en diferentes ocasiones que en una celda llegan a vivir hasta 13 personas, condiciones que impiden la correcta reinserción social de los sentenciados.
En su campaña electoral del año pasado, Alejandro Armenta Mier se comprometió a reubicar el penal y en ese inmueble de la avenida Miguel Hidalgo del centro de San Pedro, construir una clínica de maternidad y una red de rehabilitación gerontológica.
En enero de 2025, ya en el cargo instruyó a la alcaldesa cholulteca, Tonantzin Fernández, que encontrará un predio para el nuevo Cereso, que recibe a presos de diez municipios
