La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un operativo especial en Tulum tras recibir denuncias por incrementos excesivos en precios de hoteles, restaurantes y productos básicos, tras ello colocó sellos de suspensión en cuatro hoteles.
La Profeco el pasado 21 de noviembre a través de un comunicado dio a conocer sobre el despliegue de un operativo especial de monitoreo y verificación en Tulum, Quintana Roo, ello, tras recibir denuncias de habitantes y turistas sobre el incremento significativo en precios de productos básicos y servicios turísticos.
Como parte de esta acción, y en coordinación con la Secretaría de Turismo (Sectur) y el Gobierno de Quintana Roo, personal de la Procuraduría realizó un levantamiento de costos mediante el programa Quién es Quién en los Precios (QQP).
La dependencia señaló que tras la inspección se visitaron 29 establecimientos, entre ellos cinco tiendas de autoservicio, cinco de conveniencia, cinco farmacias, cinco hoteles, nueve restaurantes y cafeterías.
Detectan amplias diferencias con el centro de Tulum
Asimismo, la Profeco inspeccionó 22 establecimientos en dentro del Parque Jaguar.
Entre los hallazgos destacó que el precio promedio de una habitación sencilla es de $3,577.50 pesos, con un mínimo de $1,200.00 y un máximo de $10,569.00, siendo el Hotel Mi Amor el que registró la tarifa más elevada.
En el caso de la habitación doble, el promedio es de $4,771.94 pesos, con tarifas desde $2,200.00 hasta $13,860.00, y el Hotel Diamante K como el más caro.
Los costos contrastan con los establecimientos del centro de Tulum, donde una habitación sencilla oscila entre $600.00 y $1,200.00 pesos, y una doble entre $700.00 y $1,400.00 pesos, marcando diferencias significativas en el acceso a hospedaje dentro del municipio.
Profeco coloca sellos de suspensión y detecta irregularidades
Derivado del operativo de inspección, la Procuraduría impuso sellos de suspensión a los hoteles:
- Diamante K
- Pocna Tulum
- Villa Pescadores
- Cabañas Playa Condesa Tulum
La dependencia señaló que se colocaron los por diversas violaciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC), como:
- No exhibir tarifas.
- Carecer de términos y condiciones de servicio.
- Inducir al pago de propina.
- No entregar notas o comprobantes de hospedaje.
- Exhibir menús sin precios o en moneda extranjera.
- Ofrecer platillos en idioma distinto al español.
Aunque vale destacar que los hoteles Kore Tulum y Villa Miramar Tulum se encontraron sin actividad comercial al momento de la visita; el primero confirmó estar cerrado desde junio por baja ocupación.

Monitoreo de alimentos y bebidas reveló precios excesivos
El personal de la Profeco también realizó un monitoreo de 11 productos de alimentos y bebidas mediante el que se detectó la existencia de precios excesivos como en el caso:
- Guacamole de hasta $280.00 pesos por orden.
- Hamburguesas sencillas que superan los $400.00 pesos.
- Órdenes de tres tacos que alcanzan los $400.00 pesos.
- Tres quesadillas con precios entre $120.00 y $290.00 pesos.
También se realizaron ocho verificaciones y siete vigilancias en supermercados y farmacias como Chedraui, Walmart, Farmacon y Súper San Francisco de Asís, donde se detectaron incumplimientos como la falta de exhibición de precios y ausencia de información sobre garantías y devoluciones.
En restaurantes como Burrito Amor, Batey Mojito and Guarapo Bar, Wang Tulum, Sabor de Mar y Negro Huitlacoxe se emitieron recomendaciones para ajustarse a la LFPC, ya que se detectaron problemas similares: inducción a propina y falta de precios visibles.
Las inspecciones incluyeron también tiendas de conveniencia OXXO, 7 Eleven y GO MART, donde los precios encontrados fueron mayores que los promedios nacionales, siendo GO MART la cadena más cara en Tulum.
La Profeco reiteró que mantendrá presencia en el municipio para proteger los derechos de las personas consumidoras, mediante sus 38 Odeco, el Teléfono del Consumidor y sus canales oficiales en redes sociales.
