ESTAMBUL. Restablecido el orden tras el fallido intento de golpe en la noche del viernes al sábado, el gobierno turco prosiguió con una amplia campaña de detenciones de altos mandos militares supuestamente involucrados en la asonada.
El presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, hizo en Estambul un nuevo llamamiento a la ciudadanía a mantener ocupadas las plazas de las principales ciudades de Turquía durante la semana que viene tras el golpe militar.
El presidente reiteró que la llamada «organización terrorista de Fethullah Gülen» está detrás del intento golpista, lo que le ha dado la posibilidad de limpiar a sus seguidores de todas las instituciones del Estado.
El discurso de Erdogan fue interrumpido por gritos como «queremos ejecuciones» a lo que el presidente respondió: «en las democracias, las demandas de la gente no pueden ser ignoradas. Las demandas son debatidas en las instituciones y haremos todo lo que sea necesario».
6,000 detenidos según el Ministerio de Exteriores turco, que cifra en «más de 190» los ciudadanos muertos por oponerse al golpe, a lo que se añaden «más de 100 conspiradores golpistas muertos».