ISLAMABAD. La joven activista por la paz Malala Yusufzai, de 15 años, resultó herida ayer junto a dos compañeras de escuela tras ser tiroteadas en su región natal, el norteño valle paquistaní de Swat, informó una fuente policial.
“Poco después de mediodía un hombre detuvo el vehículo escolar en el que viajaban, preguntó por Malala y abrió fuego contra ella y otras dos niñas”, dijo un responsable policial de Swat, Wazir Badshá, que añadió que las tres están fuera de peligro.
Yusufzai fue atendida de heridas en el cuello y la cabeza, según fuentes sanitarias citadas por el periódico local Dawn.
La niña fue trasladada de urgencia desde el lugar de la agresión a un hospital de la localidad noroccidental de Peshawar gracias a un helicóptero que puso a su disposición el primer ministro, Razá Pervez Ashraf, quien condenó de inmediato el ataque.
Yusufzai recibió el año pasado el Premio Nacional de la Paz por su defensa de los derechos humanos frente a los ataques de los integristas talibanes que dominaron el valle del Swat hasta una ofensiva militar de 2009.
Malala y su familia desafiaron la prohibición impuesta por los insurgentes para impedir que las niñas acudieran a la escuela, y ella decidió además buscar una forma de contar lo que estaba viviendo.
La niña arriesgó su vida al poner en marcha un blog -bajo el seudónimo de Gul Makai- para desvelar las atrocidades cometidas por los insurgentes, lo cual le valió amenazas de muerte de los integristas locales.
La organización humanitaria Amnistía Internacional (AI) condenó “en los términos más enérgicos” el ataque de los talibanes contra la activista paquistaní Malala Yusufzai, de quince años.
En un comunicado divulgado hoy en su sede de Londres, Amnistía recuerda que la adolescente venía haciendo campaña desde que tenía once años a favor del acceso de la niñas a la educación en su región.
“Este ha sido un acto espantoso de violencia”, afirma AI, que recuerda que la joven ha luchado con “valentía” por sus derechos.
“Este ataque pone de manifiesto el ambiente altamente peligroso al que se enfrentan los defensores de los derechos humanos en el noroeste de Pakistán, donde las activistas femeninas viven particularmente bajo constantes amenazas de los talibanes”, agrega.
Según AI, en los últimos doce meses dos activistas que luchan en favor de la educación de las mujeres, Farida Afridi y Zarteef Afridi, murieron víctimas de los ataques talibanes.
La organización no gubernamental pide a las autoridades paquistaníes que demuestren el compromiso de facilitarle a las mujeres las mismas oportunidades que tienen los hombres. EFE