MONTEVIDEO/BOGOTÁ/MADRID. El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, participará durante la Cumbre de las Américas en Panamá en una reunión con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien invitó también a esa cita a los presidentes de Costa Rica y Chile, dijeron fuentes oficiales uruguayas.
El vicepresidente uruguayo, Raúl Sendic, informó de que Vázquez participará en «una reunión más reducida convocada por el presidente Obama» para analizar «el tema de la prosperidad con equidad en el continente», entre otros temas.
Según Sendic, también fueron invitados los presidentes de Chile, Michelle Bachelet, y Costa Rica, Luis Guillermo Solís.
La presidenta chilena confirmó la semana pasada que no participará en la cumbre, debido a la situación creada en el norte de su país por una serie de aluviones e inundaciones provocadas por las lluvias, que han ocasionado la muerte de al menos 26 personas.
La VII Cumbre de las Américas, bajo el lema «Prosperidad con Equidad», reunirá los próximos 10 y 11 de abril por primera vez a los 35 países del continente.
«Tenemos mucho interés en profundizar la cooperación entre los países de América. Mucho interés en profundizar el proceso de prosperidad que se ha venido dando en el continente», explicó el vicepresidente uruguayo, quien añadió que «hay dos o tres reuniones bilaterales ya solicitadas».
El presidente uruguayo, que asumió su segundo mandato al frente del país el pasado 1 de marzo -gobernó entre 2005 y 2010- hará énfasis en esta cumbre «en algunos temas relacionados con la salud, fundamentalmente en el impacto que tienen algunas enfermedades crónicas para la mortalidad en nuestras sociedades», afirmó Sendic.
Santos rechaza sanciones de Estados Unidos a Venezuela
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, mostró su rechazo a las sanciones que Estados Unidos impuso a Venezuela y apeló a promover el diálogo entre las diferentes fuerzas políticas en el país.
«Siempre hemos dicho que las sanciones unilaterales a la larga resultan contraproducentes, y por eso las rechazamos», afirmó Santos en una entrevista publicada en el periódico El Tiempo.
El mandatario colombiano señaló que la Cumbre de las Américas será una buena ocasión para que se produzca «una distensión entre Estados Unidos y Venezuela».
El Gobierno del presidente estadunidense, Barack Obama, anunció el pasado 9 de marzo una ampliación de las sanciones a funcionarios venezolanos, por primera vez identificados, a los que considera responsables de violaciones de los derechos humanos.
Asimismo, Estados Unidos declaró un estado de «emergencia nacional» por el «riesgo» que supone para ese país la situación en Venezuela.
En su entrevista, Santos señaló que cree necesario promover el diálogo entre las diferentes fuerzas políticas de Venezuela «respetando su autonomía».
«Nuestra canciller (María Ángela Holguín) ha tenido un papel muy activo dentro de la comisión de cancilleres de (la Unión de Naciones Suramericanas) Unasur, en buscar un acercamiento entre el Gobierno venezolano y la oposición», explicó.
Ex presidentes iberoamericanos empujan agenda contra Maduro
Diecinueve exjefes de Estado y de Gobierno iberoamericanos denuncian la «alteración democrática» que sufre Venezuela mediante la llamada Declaración de Panamá, que se presentará en próximo día 9, víspera de la Cumbre de las Américas.
Según informó la fundación Faes, presidida por el expresidente del gobierno español José María Aznar, los firmantes piden a los participantes en la Cumbre que aúnen esfuerzos para construir una «alternativa» a la crisis venezolana.
Los firmantes son Jorge Quiroga (Bolivia); Sebastián Piñera (Chile): Andrés Pastrana, Álvaro Uribe y Belisario Betancur (Colombia); Miguel Ángel Rodríguez, Rafael, Ángel Calderón, Laura Chinchilla, Óscar Arias y Luis Alberto Monge (Costa Rica).
También suscriben la declaración Osvaldo Hurtado (Ecuador); Alfredo Cristiani y Armando Calderón (EL Salvador); José María Aznar (España); Felipe Calderón y Vicente Fox (México), Mireya Moscoso (Panamá), Alejandro Toledo (Perú) y Luis Alberto Lacalle (Uruguay).
En la Declaración de Panamá, los exmandatarios iberoamericanos piden también la puesta en libertad de los presos políticos y restablecer las condiciones para el ejercicio de los derechos fundamentales, según la fuente.