COPENHAGUE. El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha dado hoy su consentimiento formal a ser interrogado en Londres por el caso abierto contra él desde hace casi cinco años en Suecia por presuntos delitos sexuales.
Uno de los letrados del periodista australiano, Thomas Olsson, desveló que hoy han enviado a la fiscal superior, Marianne Ny, una confirmación escrita atendiendo a su petición de hace dos meses.
La Fiscalía se había negado hasta entonces a esa medida, alegando que las leyes suecas exigen que el interrogado se encuentre en el país durante la investigación preliminar de este tipo de delitos.
Pero la posibilidad de que los delitos puedan prescribir este año hizo que Ny cambiara de postura.
«Esta es una medida que hemos demandado durante varios años, estamos contentos de que la fiscal haya llegado al mismo parecer», dijo hoy Olsson a la agencia sueca TT.
Olsson negó que su defensa haya reclamado el acceso a todo el material de la investigación y se mostró esperanzado de que el interrogatorio a Assange, refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres desde 2012 por miedo a ser extraditado a EU desde Suecia, empiece cuanto antes.
La defensa de Assange había iniciado en verano una ofensiva en los tribunales suecos para pedir que levantasen la orden de prisión preventiva contra él dictada en 2010, origen de todo el proceso.
Dos instancias jurídicas rechazaron la demanda apelando a la gravedad de los hechos y el riesgo de que Assange pudiese querer esquivar el proceso legal y una hipotética pena, resaltando además que él mismo podía poner fin a su encierro en la embajada.
Pero en su fallo de noviembre, pendiente de un recurso ante el Supremo, Apelación también criticó a la fiscal por la paralización del proceso y por no ofrecer soluciones alternativas.
Assange es buscado por cuatro supuestos delitos contra dos mujeres, que él niega, cuando estaba de visita en Suecia en agosto de 2010, pero no ha sido acusado formalmente con cargos.
El proceso ha estado rodeado de polémica sobre la solidez de las denuncias y los motivos de las demandantes, filtraciones a los medios, sustituciones de fiscales y una reapertura del caso que había sido reducido inicialmente a un delito menor.
Assange fue detenido en Londres en diciembre de 2010 y entonces comenzó un largo proceso judicial en el Reino Unido, que culminó cuando el Supremo británico rechazó su último recurso en junio de 2012.
Ecuador concedió entonces asilo político al «exhacker» para evitar que fuera enviado a EU, donde podría afrontar un juicio militar por la información confidencial difundida en WikiLeaks.