BARCELONA. El gobierno de Cataluña consideró este martes la multa de 40 mil euros, impuesta por la UEFA al equipo Barcelona por la exhibición de banderas independentistas en un partido de la Champions League, como «una terrible persecución a la libertad de expresión».

 

La vicepresidenta del gobierno catalán, Neus Munté, lamentó, en conferencia de prensa posterior a una reunión de la administración, que la Unión de Asociaciones Europeas de Futbol (UEFA) haya sancionado al Barça, por segunda ocasión, debido a la presencia de estandartes en el estadio Camp Nou.

 

La portavoz mostró la indignación del Gobierno ante la «persecución de símbolos democráticos cien por ciento», que contrasta con “la banalidad con que exhiben banderas predemocráticas o de regímenes totalitarios».

 

Por ese motivo, Munté quiso mostrar «el máximo apoyo al club Barcelona, en defensa de libertad de expresión de las personas que concurren a eventos deportivos».

 

La nueva sanción económica impuesta al Barça por la UEFA fue por la exhibición de banderas en el partido contra el Bayer Leverkusen del pasado 29 de septiembre, en el que el equipo blaugrana venció 2-1 a la escuadra germana.

 

Munté consideró que ese organismo deportivo lleva a cabo «una terrible persecución de la libertad de expresión».

 

«Queremos defender el derecho de las personas que concurren a un acontecimiento deportivo a exhibir banderas», que consideran símbolos nacionales de su país, al señalar que «no sorprende la actitud de la UEFA, pero sí nos indigna».