CARACAS. El nombramiento de María Gabriel Chávez, hija del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, como embajadora alterna ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se traducirá en que «gozará de inmunidad», afirmó hoy el legislador por el central estado de Carabobo, Carlos Berrizbeitia.

 

“Después de una serie de denuncias en Argentina y Venezuela sobre una supuesta sobrefacturación y sobreprecio de los miles de kilogramos de arroz que se están trayendo de Argentina y la vinculan a ellos, entonces se decide nombrarla embajadora», añadió el diputado opositor.

 

Berrizbeitia agregó que «al nombrarla por supuesto tiene protección diplomática, tiene un pasaporte que le da esa protección», por lo que María Gabriela Chávez quedaría al margen de cualquier investigación judicial que se realice.

 

El presunto acto de corrupción fue denunciado en Argentina por el diario Clarín, que sostiene que la empresa Bioart vendió arroz por más de 23 millones de dólares al gobierno venezolano con un «escandaloso sobreprecio» que rondaría al 30 por ciento.

 

Los dueños de Bioart se tomaron una fotografía con María Gabriela Chávez en la embajada venezolana en Buenos Aires, al momento de firmar el contrato de exportación del arroz, por lo que se presume que Chávez estaría involucrada en el negocio.

 

Berrizbeitia abundó que «desde que murió el presidente Chávez no es ningún secreto que (el actual mandatario Nicolás) Maduro comparte el poder con las hijas de Chávez, muestra de eso es que en (la residencia de) La Casona no vive la familia presidencial de Maduro, sino las hijas de Chávez».

 

El integrante del partido Proyecto Venezuela (PV) sostuvo que esta situación se debe a que la familia Chávez siente que tiene «una herencia» en el poder, que se traduce en una práctica de nepotismo que es ilegal, y una protección por parte de los poderes del Estado.

 

«Eso es como una especie de herencia, algo por supuesto que es nepotismo, los familiares directos, en este caso del fallecido presidente Chávez», lamentó el diputado, quien agrega que esto se mantiene impune porque «hay una especie de blindaje por parte del Estado».

 

El diputado señaló que este nombramiento diplomático también es una muestra del deterioro de servicio exterior venezolano desde la llegada al poder de la «revolución bolivariana» en 1999, ya que los cargos diplomáticos son asignados a voceros políticos.

 

“El servicio exterior venezolano, que era un servicio respetado en el exterior, se desmanteló durante estos 15 años, el servicio exterior está ejercido en la mayoría de los cargos por funcionarios que no han tenido carrera diplomática, que ni siquiera hablan inglés», concluyó.

 

NS