PASADENA. El futbol americano universitario nunca ha tenido un duelo de quarterbacks como el que sostendrán Jameis Winston y Marcus Mariota. Ambos súper estrellas han ganado el trofeo Heisman y es posible que en abril próximo algún equipo de la NFL se pregunte a cuál de los dos seleccionará en la primera ronda del draft universitario.
Cuando Mariota y Oregon, segundo preclasificado de la NCAA, se enfrenten a Florida State, número tres, en partido semifinal en el marco del Rose Bowl el 1 de enero, será la tercera ocasión en que dos ganadores del trofeo Heisman chocan en un partido de postemporada.
Matt Leinart, de USC, y Jason White de Oklahoma fueron los primeros en el Orange Bowl de 2005. Tim Tebow de Florida y Sam Bradford de Oklahoma lo hicieron en el partido por el título del BCS en 2008.
Esta ocasión es distinta, sin embargo, porque tiene el potencial de ser el primer capítulo de una larga rivalidad entre Mariota y Winston que comience en Pasadena, California y se alargue hasta la NFL en los próximos años.
Mariota tiene estadísticas impresionantes. Ha lanzado 101 pases de touchdown en su carrera por apenas 12 intercepciones. Esta campaña su marca fue de 38-2.
Movilidad: es sumamente veloz, ya sea leyendo un ataque de opción o cuando se trata de escapar de la bolsa cuando la defensa está a punto de atraparlo, Mariota puede herir a sus rivales con largas carreras.
Para la opinión pública es un jugador calmado y sencillo, tal vez demasiado. "Es buena persona pero no demasiado. Cuando se trata de competir lo hace muy bien", dice el entrenador de Oregon, Mark Helfrich.
Jameis Winston, por su parte, era uno de los atletas más buscados por las universidades cuando terminó la preparatoria. Nacido en Bessemer, Alabama, dijo que no le interesaban mucho las escuelas de su estado como Alabama y Auburn y las dejó para ir a Florida State.
Sus mejores momentos parecen venir bajo presión: cuando su equipo está abajo por entre ocho y 14 puntos, Winston ha lanzado 22 pases completos en 33 intentos (69 para avance de 327 yardas y tres touchdowns por cuatro interceptados. Cuando perdían por 15 o más logró 16 completos en 22 intentos (73%) para 279 yardas con un TD.
Sus entrenadores quieren que se mantenga en la bolsa de protección pero tiene la suficiente movilidad para lograr un avance si es necesario y es difícil derribarlo como lo demostró en el último juego de campeonato contra Auburn cuando evitó que un defensa lo tacleara al rechazarlo con el brazo extendido.
Para la opinión pública es carismático y confiable, pero también se le percibe como inmaduro y problemático.
El ex entrenador de Texas y analista de la cadena ESPN, Mack Brown, afirma de Winston: "Creo que no hay duda de que es el mejor quarterback cuando llega el último periodo de un partido.
"Marcus Mariota es buena persona pero no demasiado. Cuando se trata de competir lo hace muy bien"
Mark Helfrich
Entrenador de Oregon
“Creo que no hay duda de que Jameis Winston es el mejor quarterback cuando llega el último periodo de un partido”
Mack Brown
Ex entrenador de Texas