BERÍN. El Presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, mostró su fuerza en Alemania dos semanas después de la intentona golpista con una multitudinaria concentración organizada por sus seguidores en la ciudad de Colonia, blindada por la policía para evitar disturbios.
Entre 30 mil y 40 mil personas, según cálculos de las fuerzas de seguridad, se dieron cita a orillas del Rin bajo el lema «Sí a la democracia, no al golpe», entre innumerables banderas turcas y mientras en distintos puntos de la ciudad se sucedían pequeñas contramanifestaciones.
En Alemania residen cerca de tres millones de ciudadanos de origen turco y 60% de los votantes eligió en las elecciones de noviembre al Partido Justicia y Desarrollo (AKP), la formación islamista que lidera Erdogan.
En un mensaje leído desde el escenario a los manifestantes, Erdogan, quien ayer decidió el cierre de todas las academias militares del país y la expulsión del Ejército de otros mil 389 soldados sospechosos de haber participado en el intento de golpe de Estado, agradeció el apoyo de los turcos que residen en Alemania tras el golpe y aseguró que el país es hoy más fuerte.