KATMANDÚ. El Gobierno de Nepal ha pedido a los países del Golfo Pérsico y a Malasia, donde se encuentran un gran número de emigrantes nepalíes, que les faciliten el regreso a su país tras el terremoto de 7.8 grados que sacudió el sábado la nación del Himalaya.
Los países del Golfo Pérsico mantienen un sistema de patrocinio o «kafala», que permite a los empleadores confiscar los pasaportes de sus trabajadores, impidiendo que los inmigrantes cambien de empleo o salgan del país sin su permiso.
Las embajadas nepalíes han solicitado a los gobiernos de Malasia, Arabia Saudita, Qatar, Emiratos Árabes, Kuwait, Omán y Bahrein, países donde trabajan unos tres millones de nepalíes, que les permitan salir para que puedan estar con sus familias, informó hoy el diario nepalí Ekantipur.
El segundo secretario de la misión diplomática nepalí en Qatar, Nitesh Sapkota, dijo a Ekantipur que un 15 % de los ciudadanos de Nepal que allí se encuentran han pedido ayuda a la embajada para regresar a su país.
«Hemos pedido a sus compañías que les den al menos un corto periodo libre para que vuelvan a Nepal», dijo Sapkota.
Además, la Confederación Internacional de Sindicatos ha reclamado a los países del Golfo que suspendan el sistema de «kafala» para permitir así que los trabajadores nepalíes regresen a su país, de acuerdo con un comunicado en su página web.
El número de muertos provocados por el terremoto del sábado alcanzó los 5 mil 844 y el de heridos los 11 mil 538, de acuerdo con los últimos datos del Ministerio del Interior nepalí.
El terremoto del sábado ha desplazado a cerca de 2.8 millones de personas en un país con una población de unos 28 millones y unos 130 mil edificios han sido destruidos totalmente.